Vigilante fue secuestrado y torturado en una casa de Ibagué: 5 horas en el infierno

Un secuestro ocurrió en Ibagué, en el cual participaron tres personas que torturaron y quemaron a la víctima, un vigilante, a quien encerraron en una casa en el barrio San Pablo, sector de El Salado, lo hicieron llamar a su esposa, familiares y amigos y pidieron entre uno y cinco millones de pesos para su liberación. El afectado cuando fue liberado por el Gaula de la Policía, estaba al borde de la muerte, tenía heridas con arma blanca, quemaduras de primero, segundo y tercer grado en su cuerpo y se encuentra en una UCI en un centro asistencial. 

La captura 

Luego de conocer la denuncia, de la famila de Cristian Mauricio Macías Lozano, el Gaula de la Policía, montó un operativo y llegaron hasta una vivienda del barrio San Pablo de Ibagué, donde captruaron a Ricardo Andrés García Correa, Nicolás Garcia Mejía y María Valentina Sánchez Duque.

El coronel Carlos Germán Oviedo Lamprea, comandante de la Policía Metropolitana de Ibagué, señaló que, “gracias a una acción contundente de nuestro Gaula en menos de cinco horas se logró esclarecer un caso de secuestro y tortura de un hombre en Ibagué”, dijo. 

Según el alto oficial, gracias a las labores investigativas y ubicación de los celulares, la oportuna denuncia, se conoció que la víctima, quien labora como guarda de seguridad, llegó hasta la vivienda de la Comuna Siete, donde fue torturado, hicieron videollamadas y pidieron dinero a sus familiares. 

Señaló el Comandante de la  Metib que, ninguno de los tres capturados pertenece a una estructura criminal, no tienen anotaciones penales, “los encontramos en el  hecho, confirmado que estaban materializando este secuestro y tortura, y estamos trabajando para ver cuál fue el móvil que los llevó a esta situación”. 

Y ante la pregunta de Q’HUBO sobre la sevicia utilizada para torturarlo, sobre si el afectado conocía a los secuestradores, el alto oficial señaló: “Estamos haciendo este análisis, preliminarmente es posible que uno de los capturados tenía alguna relación con alguien de la familia de él”. 

¿Cómo supieron?

El Gaula de la Policía fue avisada por la esposa de la víctima, Cristian Mauricio Macías Lozano, vigilante del Hospital Federico Lleras Acosta, quien acudió a las oficinas y puso en conocimiento hacia las 9 de la mañana del lunes, que su compañero sentimental estaba secuestrado, y le pedían dinero para liberarlo. 

“Con el grupo no pensamos que eso fuera a ser una escena tan dramática, donde se encuentran los elementos con los que estaría siendo torturada la víctima. Inclusive se encontró una botella de alcohol y la plancha”, dijo el mayor Carlos Castro, del Gaula de la Policía del Tolima. 

Agregó el oficial que, “fueron cuatro llamadas a diferentes personas y una videollamada con la esposa. Las llamadas por voz a un amigo de la familia, el papá y otra amiga”. 

Según el Mayor Castro, la esposa de la víctima les mostró los pantallazos que tomó de la videollamada, la cual denominó de atípica, pues fue el propio afectado el que se encargó de hacerla. “Se observa a una persona arrodillada, sus ojos completamente morados. Inmediatamente nos pusimos en contacto con la Fiscalía General de la Nación que con su inmediatez, nos da unas órdenes de policía judicial y tras unos actos de inteligencia logramos la ubicación del inmueble donde se encontraba la víctima”, dijo comandante del Gaula Tolima. 

Al borde de la muerte 

Enfatizó el Mayor Casto que, al ingresar a la vivienda, encontraron cosas terribles, “Nos encontramos con una persona tirada en el piso, un lago hemático y ya a punto de fallecer. Tenía varias heridas con arma cortopunzante. Pues una escena que la verdad causa mucho pánico, había una plancha conectada, la cual según la investigación, estaría siendo utilizada para torturar a esta persona”, dijo. 

Añadió que, enseguida de su liberación y captura de las tres personas, llevaron al guarda de seguridad a un centro asistencial donde permanece bajo pronóstico reservado, en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), que incluso lo iban a trasladar a un centro médico a Bogotá. 

“Si no hubiéramos llegado, esta víctima posiblemente había fallecido y se actúa con el deber cumplido y la satisfacción del salvar una vida”, puntualizó el oficial. 

Los móviles 

Aunque durante la rueda de prensa no se conocieron los móviles del secuestro y tortura, durante la audiencia virtual efectuada ante el Juzgado Séptimo de Control de Garantías, la Fiscalía señaló que Nicolás García Mejía les indicó durante la liberación que la víctima de este secuestro, al parecer le estaba haciendo propuestas indecentes a su hermana menor d edad.

Y es que al parecer el afectado le envió mensajes de whatsapp y por este medio convencieron a Cristian Mauricio a acudir a la vivienda donde fue retenido contra su voluntad y después torturado. 

Según la delegada del ente acusador, a la víctima le propinaron varias heridas con arma blanca en su cuerpo, lo impregnaron de alcohol y le prendieron fuego. Además lo habrían quemado con una plancha caliente. 

Asimismo, que el progenitor del vigilante fue obligado a llevar los documentos de la motocicleta de su hijo pues, al no tener dinero, le dieron esa indicación. 

La Fiscal Tercera Especializada delegada ante el Gaula les imputó cargos por secuestro extorsivo agravado por someter a la víctima a tortura física y moral y homicidio agravado en la modalidad de tentativa, los cuales ninguno aceptó. 

Noticias Recientes

Suscríbete

Recibe contenido diario con nuestra suscripción mensual.

Danos tu opinión