IBAGUÉ. Haber sido privilegiada como la madre de Freddy Alejandro Castaño Trujillo, ‘El Mono’, un niño que desde que se lo pusieron en sus brazos tuvo todo de especial, fue la principal motivación de Luz Mila Trujillo para seis años después dar apertura al primer club deportivo para niños con discapacidad cognitiva.
Se llamó Club Nuevos Horizontes, toda vez que quiso ser un nuevo mundo para todos aquellos ‘pequeñines’ que en su momento fueron observados de forma extraña y hasta objeto de burlas.
Se dijo a sí misma que su vida estaría destinada a hacer feliz a su hijo, y en compañía de otros ocho padres que pasaban por una situación similar, se pusieron ‘manos a la obra’.
“Comenzamos a trabajar desde 1992, en el área de natación, teníamos nueve niños y al comienzo fue supremamente complicado que nos aceptaran, porque las personas miraban de forma extraña a los niños y muy pocos se le acercaban. Hasta les revisaban la ropa interior por si habían ensuciado la piscina. Fue una época dura, pero la superamos”, indicó Constanza Trujillo, hermana de Luz Mila, y tía del ‘Mono’, quien ha sido la de ‘armas tomar’ en el Club.
Y agregó: “En 1994 nos dieron el reconocimiento jurídico, y logramos ganarnos un carril sólo para nosotros en la piscina, eso fue un avance increíble, y desde entonces nos fuimos ganando el respeto que hoy tenemos”.
Ese fue fue también el comienzo de muchos proyectos, ya que se afiliaron a Fides, y comenzaron a viajar por toda Colombia para dar a conocer su labor.
Hoy en día son algo más de cien los niños que hacen parte de este mundo de sueños en la práctica de natación, baloncesto, atletismo, gimnasia, música y danzas, quienes a pesar de que en el 2008, el motor del club que fue ‘El Monito’ partió al Cielo, dejó en la tierra la semilla de la felicidad en su madre, tía, amigos y demás personas que le abrieron su corazón a esta causa y que han aprendido que la felicidad se logra, con sólo desear sonreírle a la vida.
LOS DEPORTES
Nuevos Horizontes fue el primer club de discapacidad cognitiva en Colombia, y arrancó con la natación. Siete años después, en 1999, innovó con la práctica de la equitación, que se realizaba gracias a la colaboración de la Policía de Carabineros, pero a los pocos años fue suspendido. Luego llegó el atletismo, la gimnasia, el ciclismo, y recientemente el baloncesto.
MÚSICA Y BAILE
Las danzas nacieron hace ocho años como una manera de diversión e inclusión social para los niños de este Club, quienes han sido ganadores de la mayoría de eventos en los que participan.
La llegada de la música fue el sueño cumplido de un ángel que según todos los niños, los observa desde el Cielo.
Se trata del anhelo que tuvo en vida Freddy Alejandro, ‘El Monito’, quien le pedía a su mamá, Luz Mila, instrumentos para tocar y ésta, luego de su fallecimiento en el 2010, decidió cumplírselo.
“Fue un sueño de él que se convirtió en uno mío, porque siempre quise verlo feliz. Por eso compré instrumentos y desde hace dos años tenemos el grupo musical, que es el que acompaña al de danzas”, indicó Luz Mila Trujillo.
ANGÉLICA MAHECHA URIBE