IBAGUÉ. Norma Constanza Sánchez vive en el barrio Tulio Varón y denunció que por poco es víctima de una bala perdida que ingresó por la ventana de su casa.
Ella estaba en el segundo piso de la vivienda localizada en la manzana U, donde en las noches trabaja en los muñecos que usará en Navidad para decorar.
“Estaban siguiendo a unos muchachos que sacaron un perro, porque al parecer el animal mordió a una persona”, dijo.
Uno de los pelaos fue subido a una motocicleta de la Policía y el otro corrió para ingresar a su casa, y en ese momento se escucharon los disparos.
Cuando la mujer escuchó los primeros tiros corrió, fue a la terraza con su esposo y vieron a los policías.
Al escuchar el tercer disparo, ella le dijo al marido que había sido en la residencia, pero él le manifestó que se calmara.
Sánchez descubrió que el proyectil entró a su casa porque corrió la cortina y vio el hueco en la ventana: “Busqué y vi que en la pared estaban el hoyo y la bala”.
A Sánchez le preocupa lo que sucedió, porque una bala perdida por poco mata a su padre en el barrio Jordán donde un vecino disparó y la ojiva le cayó en un dedo del pie. “No me parece que hubieran hecho esos tiros, porque los muchachos no dispararon”, afirmó.
