EFE. En un partido de alta tensión por sus connotaciones políticas, Suiza venció 3-2 a Serbia y clasificó a sus terceros octavos de final seguidos en un Mundial, en los que enfrentará a Portugal.
Los goles suizos fueron obra de Xherdan Shaqiri, en el minuto 20, Breel Embolo (44’) y Remo Freuler (48’), mientras que del lado serbio marcaron Aleksandar Mitrovic (26’) y Dusan Vlahovic (35’).
Shaqiri, nacido en Kosovo (país bombardeado por Serbia en los 90), celebró el primer gol con rabia llevándose el dedo a la boca pidiendo silencio a la grada visitante y mostrándole varias veces su nombre señalándose su camiseta.
A diferencia del controvertido precedente de Rusia-2018, el actual jugador del Chicago Fire no realizó esta vez el símbolo del ‘águila bicéfala’, para representar la bandera albanesa, un gesto que le costó una sanción económica de la FIFA.
El origen kosovar de varias figuras de Suiza hacía temer una repetición de ese polémico triunfo de 2018 de la ‘Nati’ por 2-1 también en la primera fase.
Los goles fueron obra entonces de Shaqiri y de Xhaka, también de raíces en Kosovo, la antigua provincia serbia que declaró su independencia en 2008 sin ser reconocida por Belgrado y donde una parte de la población se identifica con el nacionalismo albanés.
La atención en Catar se volvió a posar en el duelo de ayer, cuando el equipo serbio desplegó la semana pasada en su vestuario una bandera de su país que lucía el mapa de Kosovo y la inscripción “no hay rendición”.
Es por eso que el compromiso tuvo varios momentos de roces y tensión. Afortunadamente, al final no pasó a mayores, y fueron los suizos los que terminaron celebrando.
Grupo G
- Brasil
6 pts. (2) - Suiza
6 pts. (1) - Camerún
4 pts. (0) - Serbia
1 pt. (-3)