IBAGUÉ. Ante la mirada de una docena de Policías que custodiaban un Palacio Municipal aparentemente vacío, arribaron sobre las 6:00 de la tarde a la Plaza de Bolívar alrededor de cinco mil personas que atendieron el llamado de un colectivo de medios de comunicación y ciudadano. Se trataba del ‘cacerolazo’, la protesta programada contra la Administración local en cabeza del alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo, por el elevado costo de las tarifas del impuesto predial en la actual vigencia.
El ‘cacerolazo’, cuyo punto de partida fue el Parque Galarza, inició con tensión por la presencia del joven Cristian Villanueva, acérrimo seguidor de Jaramillo, quién inexplicablemente asistió a la cita, pero el grupo de manifestantes le solicitó a la Policía Metib que lo retirara del evento, por lo que se fue entre chiflidos y abucheos.
En adelante todo fue un ‘carnaval’ que ascendió por la carrera Tercera a paso lento con pancartas y con un ensordecedor ruido. En el grupo hubo personas de todos los estratos sociales que se unieron por la causa en común.
Tras una hora de recorrido, el grupo se plantó frente a una Alcaldía oscura, donde probablemente no había rastro del mandatario de los ibaguereños. Allí los tres comunicadores que lideran la campaña ‘No al predialazo’, tomaron un micrófono para expresar su profundo amor a la Ciudad y agradecer el apoyo a la convocatoria. A su vez los ciudadanos tildaron de “ladrón” a Jaramillo por los incrementos.
Es de anotar, que previo a la manifestación la Alcaldía anunció la suspensión del convenio con el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (Igac) para la actualización catastral, lo que representa el primer triunfo del colectivo.
