Un sentimiento de tristeza y asombro invade los corazones de los habitantes del barrio Los Ciruelos, por la intempestiva partida de Eduardo Trujillo, uno de los fundadores del sector y quien siempre se caracterizó por su don de servicio hacia la comunidad.
Un infarto fulminante habría apagado la sonrisa de don Eduardo, a quien sus amigos más cercanos describen como un hombre alegre, carismático y solidario.
Una partida inesperada
El pasado miércoles, habitantes del barrio Los Ciruelos y de Ambalá – parte alta, recibieron una noticia que los tomó por sorpresa: Eduardo Trujillo había fallecido, al parecer producto de un infarto. Según el relato de varios ciudadanos, don Eduardo, quien se había convertido en un referente para la comunidad, el miércoles se sintió indispuesto y decidió acudir al hospital en compañía de su esposa, pero de manera infortunada, cuando iban de camino al hospital Federico Lleras Acosta, el líder comunal sufrió un paro cardiorrespiratorio, que terminó segándole la vida.
Resaltó por su carisma
Manuel Silva, uno de los residentes de Los Ciruelos, le contó a Q’HUBO que don Eduardo se había ganado el cariño de toda la comunidad con su particular y amable forma de ser. Todos sus conocidos lo consideraban una persona respetuosa y sabia, a la que muchas veces acudieron para solicitarle consejos y tomar buenas decisiones en beneficio del barrio.
“Él siempre estaba sonriente, tenía un don humano que sobresalía, siempre dispuesto a ayudar a toda la comunidad, fue por eso que siempre lo vimos como un líder”, relató Manuel, quien también fue uno de sus amigos más cercanos.
Al cierre de esta edición, los habitantes del barrio Los Ciruelos, le daban el último adiós a don Eduardo, un hombre de 60 años que deja un legado de solidaridad y unión en la comuna Seis de la capital tolimense.
Dato: Eduardo Trujillo, era padre de dos hijos y oriundo de Armero – Guayabal.