IBAGUÉ. A las 6:40 de la tarde del sábado, la muerte empezó a pasearse por la capital del Tolima. La primera visita fue en una tienda de La Martinica, sector La Variante, y la otra en el barrio Modelia, en El Salado. En este último, un hombre mató a dos personas, entre ellas un menor de edad.
Un hombre con gafas oscuras y casco llegó al establecimiento de La Martinica, donde había dos hombres tomando cerveza. Una de las víctimas, al ver al individuo, se sorprendió. Su amigo giró y vio que el ‘gatillero’ empuñaba un arma de fuego y empezó a disparar.
Una bala rozó la frente de Nelson Orlando Peña Parra, de 40 años de edad, quien cayó y empezó a rezar mientras el asesino disparaba contra Maximiliano Olaya Meneses, de 44 años de edad, conocido por sus vecinos como ‘Marcelo’.
La mujer encargada de atender el establecimiento, segundos antes de los tiros había llamado a sus pequeños hijos para que cenaran: “Al escuchar los disparos cogí a mis hijos y me fui para la casa de un vecino”, contó.
Según el reporte de la Policía, el sicario se subió a una motocicleta RX 115 y se fue. Nelson se comunicó con un hermano con quien había estado media hora antes: “Me dijo que le habían disparado y que fuera por él”, manifestó el pariente.
El más grave era ‘Marcelo’ a quien trataron de controlarle el sangrado del cuello haciéndole presión con las manos. Un carro de la Policía llegó y en él llevaron a los baleados al Hospital Federico Lleras Acosta, donde Olaya Meneses falleció.
Los dos hombres trabajaban con caballos. ‘Marcelo’ había llamado a su socio para que se reunieran con el fin de hacer un negocio.
Doble crimen
Cuatro horas después, entre las manzanas 90 y 88 del barrio Modelia un residente, al parecer por un problema de dinero con Domingo Antonio García, de 22 años de edad, empezó a dispararle. La víctima recibió dos tiros. El joven malherido cayó a un costado de la casa 14 de la manzana 88, donde la mamá de Cristian David Oliveros Cárdenas, de 15 años, sale todas las noches con su negocio de comidas rápidas.
Minutos antes, Oliveros Cárdenas, le pidió una salchipapa a su progenitora, y se la estaba comiendo cuando empezaron los disparos.
Los parientes del ‘pelao’ contaron que las personas empezaron a correr desesperadas. El joven fue a buscar a sus hermanitos menores y le dijo que al vecino que no disparara porque había niños. Sus palabras no sirvieron porque recibió dos impactos, uno en el tórax y el otro en el hombro derecho.
Un pariente del menor de edad, al ver que cayó al frente de la casa 6 de la manzana 90, le prestó los primeros auxilios.
La Policía llevó a ambos hacia un centro asistencial, donde murieron. En el mismo suceso, Johan Morales Garzón, de 21 años de edad y conocido de García, sufrió una herida superficial en la pierna izquierda.