IBAGUÉ. Ante un juzgado fue presentada Alba Lucía Arango Galvis, de 35 años de edad, quien fue detenida en la Vereda Pueblo Nuevo finca El Paraíso de Mariquita, ya que tenía una orden de captura por ser investigada desde el 2012 por el delito de tortura agravada en concurso heterogéneo y trata de personas.
Le dieron intramural. Los hechos por los cuales un Juez envió a Arango Galvis a la Cárcel de Picaleña ocurrieron en octubre del 2012 cuando la imputada con su compañera sentimental habrían sometido a menor de 16 años de edad, a toda clase de maltratos físicos y psicológicos. La investigada tiene antecedentes por el delito de hurto y tráfico, fabricación y porte ilegal de estupefacientes.
Estaba desprotegida. De acuerdo con el relato de la Fiscalía en ese año el tío de la menor la llevó a casa de las dos mujeres porque supuestamente le iban a pagar 150 mil pesos por desempeñarse como empleada de servicio doméstico, cosa que según la víctima nunca pasó. La adolescente había sido abandonada por sus padres.
Al parecer durante el primer mes la adolescente no recibió maltrato alguno pero después de unos meses, Lucía Arango Galvis comenzó a atentar contra su integridad. La niña dijo que su victimaria le cortó el pelo con cuchillo, la obligó a comer al lado de los animales, y le propinó toda clase de heridas en su cuerpo.
Según la persona que alertó a las autoridades sobre los supuestos vejámenes a los que la menor era sometida, Lucía Arango Galvis se se desempeñaba como trabajadora sexual en un establecimiento conocido como ‘El Tapete Rojo’ y su compañera Esperanza Arcila Arando, quien presuntamente participó en el delito, trabajaba leyendo el tabaco y realizando toda clase de hechos relacionados con la magia negra, lo que era utilizado para chantajear a la joven.
Alguien la ayudó. Al parecer la mujer que ayudó a que el caso de la menor se conociera la abordó un día cuando ella fue a hacer un mandado a la tienda.
La testigo dijo que la adolescente le había contado su situación y le había dado las indicaciones para comunicarse con su familia.
En ese entonces la menor quedó bajo la protección del Instituto de Bienestar Familiar, pero las mujeres mientras se daba la orden de captura lograron salir la casa en donde la menor estuvo retenida por más de tres meses, ubicada en la calle Primera A número 16-19.
De acuerdo con el reporte de los uniformados de la Policía cuando llegaron a efectuar la investigación, las mujeres ya habían salido de la vivienda y esta ya era ocupada por personas ajenas al caso.
Para ese tiempo la víctima de la hoy detenida fue atendida en el Hospital Santa Ana de Falan, en donde se le trataron algunas infecciones, una anemia severa y algunas heridas que según las Fiscalía aún se ven reflejadas en su cuerpo.