Javier Ancizar Rincón Ramírez, de 37 años de edad y su niño Javier Alexander Rincón Céspedes, de 12 años, fueron arrastrados por el agua al caer de una altura de 58 metros en la cascada de las Ventanas de Tisquizoque, en el municipio de Florián en Santander.
La caída sucedió hacia las 12:51 del mediodía del lunes, cuando Rincón Ramírez, oriundo del Líbano, observó cómo la corriente le arrebataba a su pequeño Javier Alexander Rincón Céspedes, quien acababa de resbalar en un paso peligroso, llevándolo rumbo a una caída de 58 metros por la cascada del lugar.
Sin pensarlo dos veces, Javier Ancízar se metió al afluente que con fuerza y lo resbaloso de la superficie hizo que tanto padre como hijo quedaran a merced del abismo.
Un grupo de búsqueda el mismo día de los hechos encontró el cuerpo del pequeño mientras el de su progenitor aún no aparece.