Tolima cayó 1-2 en Manizales ante el Once Caldas

IBAGUÉ. Dos minutos. Apenas eso tardó el Once Caldas para ponerse adelante en el marcador frente al Deportes Tolima en el estadio Palogrande, en el cotejo que jugaron ayer por la sexta fecha de la Liga Águila 2019-II.
Pobre Alberto Gamero. Según el relato de la transmisión por televisión, el técnico del Vinotinto y Oro se mostró sumamente preocupado, y lo único que pudo hacer fue mirar el reloj. No lo podía creer, nuevamente su escuadra empezaba un partido con un gol de camerino.
Le sucedió en Palmaseca frente al Deportivo Cali (1′), luego en el ‘Manuel Murillo Toro’ ante Junior (2′) y ahora en Manizales fue el ‘Blanco-Blanco’ el que lo ‘vacunó’ desde temprano, por intermedio de Javier Reina.
El atacante se metió con total tranquilidad entre los dos centrales ‘Pijaos’ para recibir un excepcional pase de Juan David Rodríguez, y le soltó un remate cruzado a Álvaro Montero que no pudo contener. El guardameta por poco se lesiona al intentar reaccionar en esa acción que ratificó que la ‘Tribu’ tiene una problemática seria en su zona posterior.
Eso sí, el conjunto de la ‘Tierra Firme’ respondió de inmediato y empató el cotejo (6′). Marco Pérez le ganó la redonda a dos hombres sobre el área grande y la línea de meta, mandó un centro a ‘tres dedos’ y de atrás apareció Juan Guillermo Arboleda para firmar el 1-1.
El lateral no dudó en impactar de primera la pelota, la cual rebotó en el piso antes de golpear a un contrario. Esto llevó a que el balón hiciera una parábola que dejó sin posibilidades al arquero Gerardo Ortiz.
La igualdad resucitó anímicamente al visitante, y a la par bajoneó al dueño de casa. Por eso Tolima se hizo dominador de las acciones, sacándole provecho al campo mojado, y sobre los 8 minutos por poco se pone adelante en la pizarra con un zurdazo de Ómar Albornoz.
Sobre los 23, Caldas se animó a atacar, y Darío Rodríguez inquietó los tres palos defendidos por Montero, quien hasta el descanso no tuvo mayor trabajo, al igual que Ortiz, ya que el compromiso se desarrolló principalmente en la mitad de la cancha.

‘Penalizados’
Once Caldas salió en la segunda mitad a tratar de ‘comerse’ a su contrincante, y estuvo muy cerca de conseguirlo a los 60. Afortunadamente para los ‘Musicales’ el tanto de los ‘Albos’ fue anulado por fuera de lugar.
Tras acomodarse bien en el campo, el elenco dirigido por Alberto Gamero equilibró la confrontación, y se animó a meter susto. A los 61 lo hizo Rafael Carrascal con un ‘cañonazo’ de que le quemó los guantes a Ortiz.
Sobre los 66, Pérez se saboreó una nueva anotación en el torneo, pero el guardameta le negó el festejo con una de sus piernas. La asistencia fue de Albornoz, quien poco después se animó a pegarle desde lejos, aunque sin éxito.
Faltando 10 para el cierre, cuando el Vinotinto y Oro mejor jugaba, y parecía que tenía controlado el partido, tal y como sucedió frente al Junior, el Once Caldas logró anotar el gol que sentenció el 2-1 definitivo.
El recién ingresado Ménder García probó los reflejos de Montero, quedó servido el rebote y cuando Darío Rodríguez se disponía a aprovechar el ‘papayaso’, el central Johnny Mostacilla lo desestabilizó en su intento de rechazar, cayó, y el juez decretó penal, el cual fue bien ejecutado por el mismo afectado.
Gamero realizó dos cambios de inmediato, pero a su conjunto no le alcanzó para empatar, y quedó muy cerca de perder un lugar entre los ocho primeros de la Liga, en la que este miércoles (6 p.m.) recibirá al Bucaramanga por la séptima fecha.

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