IBAGUÉ. “Siento como si un carro me hubiera pasado por encima”, le dijo ayer a Q´HUBO Wilton Fabián Roa Carrillo, el taxista que recibió cuatro puñaladas de un atracador que se quería quedar con su argolla de matrimonio.
Y no es para menos, tiene dos heridas de arma blanca en su pecho, una en el cuello y otra en el brazo izquierdo.
Los hechos. El intento de atraco ocurrió el sábado a las 4:30 de la tarde. “Era mi segunda carrera. Recogí al joven en la calle 16 entre Tercera y Cuarta. Me dijo que lo llevara al barrio El Bosque y no me dio miedo pues era temprano”, contó el taxista de 38 años de edad.
Mientras llegaban al destino, el ‘cheveruky’ entabló conversación con el atracador quien se sentó en el puesto del copiloto con un casco en sus manos.
“Cuando ya ibamos llegando le ví una herida en los dedos. Le pregunté que le había pasado y me dijo que nada. Lo noté nervioso y apretaba el casco. Cuando entramos al barrio, me dijo que no me haría nada pero que le entregara la argolla y del casco sacó ‘tremenda’ navaja”, agregó.
Roa Carrillo intentó quitarse la argolla pero como no le salió, le habría dicho al victimario que se la quitara él pero tampoco pudo. “Él se pusó muy nervioso, me quitó las llaves del carro, forcejeamos, me pegó las puñaladas y salió por la ventana del taxi”, aseguró la víctima.
Sin darse cuenta que estaba herido, el taxista se bajó del vehículo e intento perseguirlo pero la comunidad le dijo que no lo hiciera, que estaba herido. De esta manera se subió al vehículo, lo prendió y al salir del barrio llegaba una patrulla. Uno de los policías se subió al auto y lo acompañó.
Sin embargo, las fuerzas le alcanzaron hasta el barrio Casa Club. “Yo iba para el Federico Lleras pero las fuerzas se me acabaron. Cogí el celular para llamar a mi esposa y no pude más. Dije: Me morí”.
Horas después despertó en las urgencias de la Clínica La Nuestra donde permanece.
Ayer le ‘sacaron’ varios exámenes y le drenaron un pulmón. La argolla está guardada en la casa.
