IBAGUÉ. El absurdo conflicto interno colombiano se llevó los sueños de otro joven tolimense. En esta ocasión, se trata de la vida del soldado profesional Pablo Emilio Borja García, quien murió tras la explosión de un artefacto instalado por el Ejército de Liberación Nacional, ELN, en Norte de Santander.
El hecho. En un comunicado, el Ejército Nacional informó que el trágico hecho ocurrió la madrugada del viernes mientras soldados del Batallón de Operaciones Terrestres No. 11 se encontraban en desarrollo de operaciones militares de seguridad y defensa, en el oleoducto Caño Limón Coveñas en Convención, Norte de Santander, cuando fueron víctimas de la activación de un artefacto explosivo improvisado instalado por parte del Grupo Armado Organizado, GAO – ELN, frente Héctor.
“De forma inmediata se activaron los protocolos de seguridad para ofrecer el apoyo médico a los héroes afectados, pero lamentablemente, como resultado de este atentado terrorista el soldado profesional Pablo Emilio Borja García, fallece por la gravedad de las heridas”, refiere el escrito y agrega: “La Fuerza de Tarea Vulcano, lamenta profundamente la muerte de nuestro soldado profesional Pablo Emilio Borja García, quien con arrojo y en cumplimiento de la misión constitucional trabajó por la seguridad del departamento, asimismo, extendemos un saludo de condolencia a sus familiares y amigos, quienes hoy sufren la pérdida de un valeroso héroe de la patria”.
Última visita. Familiares y amigos, recuerdan a Pablo Emilio como un joven alegre, enérgico, soñador y responsable, que desde niño soñó con pertenecer al Ejército Nacional. En el 2015 lo logró. Hace mes y medio visitó a su familia en Rovira, Tolima, su tierra natal.
En esa oportunidad, una vez más le recordó a sus padres y hermanos que la meta era comprar una casa y seguir ayudándoles. Con esas promesas partió rumbo al Catatumbo a defender la patria y aunque el peligro era latente, nadie imaginaba que nunca más lo volverían a ver con vida.
Al cierre de esta edición, con el corazón roto, sus allegados esperaban que el Ejército arribara al pueblo con los restos mortales del joven.
Allí en medio de honores, le darán el último adiós.
