‘Señas de mi Folclor’ es una apuesta por la educación inclusiva. Esta novedosa cartilla le apuesta al aprendizaje en pro de la comunicación con niños y niñas con discapacidad auditiva. La iniciativa, que fue ganadora de estímulos del Ministerio de Cultura, fue creada por el docente de música Jorge Enrique Rosas Amaya, quien le contó a Q’HUBO en qué consiste esta llamativa herramienta pedagógica.
Educación inclusiva
En su amplio recorrido como docente de Música en el Conservatorio del Tolima, Jorge Enrique Rosas ha investigado el tema de las discapacidades. Actualmente, lleva a cabo sus estudios de Doctorado en Educación y como parte de su trabajo investigativo, abordó el tema de la discapacidad auditiva.
“Debemos tener en cuenta que la lengua materna de las personas sordas no es el castellano, sino la lengua de señas colombiana. La mayoría de la población no habla ese lenguaje”, explicó el docente.
Pensando en eso, surgió la idea de crear una herramienta educativa que ayude a los niños hablantes a acercarse a la lengua de señas. Para él, la inclusión consiste en que estos menores puedan insertarse en la sociedad, siendo la comunicación un factor clave. “Así nació el proyecto investigativo, a partir de la discapacidad que tiene la sociedad para comunicarse con esta población”, puntualizó Rosas, quien también destacó el hecho de que ahora muchos medios de comunicación incluyen la traducción en lenguaje de señas de los programas.
Una herramienta lúdica
Según Rosas, la cartilla está diseñada para cualquier docente. A partir de unas canciones infantiles, compuestas por él mismo, se aprenden palabras del lenguaje de señas. “Primero los niños aprenden las letras de las canciones, y luego se les dice cómo se hace la señal de cada palabra”, explicó el creador del texto, quien sueña con que en los colegios a los niños se les enseñe ese lenguaje desde primaria.
Respecto a su proyecto, agregó: “La cartilla viene con 8 canciones y 56 señas. Además, trae las partituras y los audios de los temas. Todos son inéditos”. Como ganador de la convocatoria de estímulos 2020 del Ministerio de Cultura, el profesor recibió un presupuesto con el cual desarrolló parte de la iniciativa, pero él lo completó con recursos propios, pues incluyó la grabación de las canciones en un estudio musical.
Música nuestra
Otro enfoque del proyecto es el uso de géneros musicales de Colombia. Según el investigador, la intención es también que la música folclórica se arraigue en los niños de primaria. “Esa apropiación de identidad en ellos es casi nula. Por eso, el segundo propósito del proyecto es la enseñanza musical de géneros como bambuco, currulao, porro, carranga y guabina”, explicó el docente, quien añadió que las canciones son para niños, escritas en tonalidades que ellos pueden cantar fácilmente. Además, hizo énfasis en que la música no es algo solo para distraer, sino también para educar, algo que a su parecer se ha perdido un poco en lo corrido del siglo XXI.
Una vida como educador
El profesor Jorge Enrique Rosas Amaya es licenciado en Música de la Universidad Surcolombiana, magíster en Investigación Musical y trabaja hace 8 años en el Conservatorio del Tolima. Su interés por la pedagogía desde su especialidad, le ha llevado a enfocarse en educación básica y actualmente también adelanta un proyecto investigativo sobre la corporalidad y el movimiento, que aborda el aprendizaje en los niños a partir de la música y el cuerpo.
TOME NOTA: Si está interesado en adquirir la cartilla o conocer más sobre el proyecto, puede visitar su página en Facebook: ‘Señas de mi folclore’, o comunicarse al número celular 3106774330.