IBAGUÉ. En lo que va corrido del año las autoridades policiales han tenido que acudir a los barrios periféricos de Ibagué para atender sicariatos, homicidios, asaltos, grescas, asonadas, y una serie de situaciones protagonizadas por varios ciudadanos que pierden la vida, o las marcan debido a las heridas que reciben, o deben someterse ante la ley. Esta vez un ayudante de construcción recibió varios disparos en extrañas circunstancias por parte de dos hombres que se movilizaban en moto.
La historia. Andrés Camilo García Gómez, ‘El Flaco’, de 22 años de edad, iba por una calle destapada del barrio Nueva Castilla, cuando dos hombres que se transportaban en motocicleta le dispararon en varias ocasiones.
Según algunos testigos García Gómez, iba a pocos metros de la construcción donde hace más de dos meses se desempeña como ayudante de construcción cuando los motorizados le dispararon por detrás y se devolvieron hacia la parte alta del barrio.
Lo ayudaron. El hombre cayó de su moto y tendido en el camino de herradura pedía ayuda, varios vecinos luego de percatarse de que los presuntos ‘gatilleros’ ya no estuvieran cerca, acudieron para ayudarlo, llamaron a la Policía y a una ambulancia que tardó en llegar obligando a los agentes de la Policía Metropolitana a llevar al herido en una patrulla hasta la Clínica Cafesalud de la calle 60 donde fue remitido hasta la Clínica Tolima.
Los vecinos aseguraron que se escucharon seis tiros, pero Andrés Camilo recibió uno en el cuello, otro en el pecho y el último en su brazo izquierdo que sufrió una fractura.
Un conocido de ‘El Flaco’ aseguró que siempre lo veían temeroso como si le fuera a pasar algo, y que una vez estaban reunidos en una tienda cerca al trabajo cuando un compañero lo asustó por detrás y que supuestamente él se alteró y uno de sus amigos lo calmó y le dijo que no le iba a pasar nada.