IBAGUÉ. Sobre la 1:00 de la madrugada de ayer, el Cuerpo de Bomberos de Ibagué recibió el llamado de alerta sobre un voraz incendio en la calle 22 sur número 11 – 77 del barrio Ricaurte parte baja que arrasó con una habitación al fondo de un inquilinato, propiedad del señor Mario Alfonso, vigilante desempleado desde hace algunos meses.
“No sabemos en qué momento se prendió todo eso porque no hubo cortocircuito, ya que la luz funcionaba normal. Acá vivimos hace 30 años. Estaba durmiendo en la habitación cuando vi un reflejo y sonaba duro. Salí a mirar y llamé a los bomberos. Me pidieron que bajara la cuchilla de luz, cuando vimos todo en candela”, manifestó el afectado, de 52 años de edad.
Dentro de las pérdidas, el señor Alfonso manifestó que fueron “unas camas, un televisor a color, la estufa, la licuadora, las tapas de las ollas, todo se perdió. Cuando mi hijo viene de Bogotá, se quedaba acá. Con todo lo que había, creemos que son unos 800 mil pesos en pérdidas”, manifestó.
Lo extraño para el afectado, es que hace cerca de un año sufrió una situación similar cuando al fondo de su predio, donde tenía unas gallinas, se registró un incendio del que tampoco se conocen las causas: “¿Cómo puede prenderse eso así? La pared quedó toda negra de lo quemada. No sabemos qué pasó porque ni fósforos teníamos guardados. Lo que me preocupó en el momento era el cilindro de gas que no se estalló pero los bomberos lo alcanzaron a sacar”, precisó el señor Alfonso.
“Gracias a Dios no había nadie durmiendo allá. Fue tremendo, cuando me di cuenta empecé a gritar. Al ver toda esa candela, ¿quién no se asusta?”, comentó con la voz aún afónica, Martha Villamil, inquilina del lugar. La situación fue controlada por dos móviles de las estaciones Centro y Sur del Cuerpo de Bomberos de Ibagué, y según el reporte preliminar, se desconocían las causas de la conflagración.
