En el último mes, la apariencia de la laguna ‘El Zorro’, ubicada en Picaleña, no ha sido la misma de siempre debido a que luce más seca. Por lo anterior, la Personería municipal y Cortolima realizaron una inspección y detectaron que había una obstrucción y desvío del afluente.
Durante el recorrido adelantado por Johanna Ardila Salazar, personera encargada, y la ingeniera de Cortolima, Érika Gómez, encontraron un panorama desolado y desértico en el afluente, que es importante para la conservación de la fauna y flora de la zona.
Según el ente de control, hay una barricada en uno de los puntos de ingreso del agua que es desviada, al parecer, hacia un canal de riego. Por ese motivo, la Personería solicitó a Cortolima adoptar las medidas correspondientes, ya que el desvío impide que la laguna cumpla con su función ecológica.