REDACCIÓN Q’HUBO – qhuboibague@gmail.com
Habitantes de la vereda Tomogó, en San Luis, capturaron a dos sujetos de 18 años que vestían prendas camufladas, portaban armas de fuego y cuchillos y, al parecer estarían robando y extorsionando a ciudadanos de la zona desde hace aproximadamente 10 meses. Una tercera persona que acompañaba a los presuntos extorsionistas logró escapar.
Estaban cansados
La tarde del miércoles 8 de diciembre, tres sujetos vestidos con camuflados de uso privativo de las Fuerzas Militares y armados con fusiles traumáticos, un revólver, una pistola y tres armas blancas, llegaron hasta una finca ubicada en la vereda Tomogó, de San Luis y, según versiones de la comunidad, intentaron asaltar a la única persona que se encontraba allí.
La comunidad fue alertada del hecho, se dirigió hasta el lugar y detuvo a dos personas de 18 años. Según versiones extraoficiales, estos jóvenes habrían sido identificados como Edilberto Bohórquez Méndez, natural de Tame, Arauca y habitante del Guamo; y Andru Steven Vera Sierra, natural de Granada, Meta. Sin embargo, dicha información aún no ha sido confirmada por las autoridades.
Según información de inteligencia militar, estos serían los mismos individuos que llevaban cerca de 10 meses extorsionando a comerciantes y ganaderos de San Luis, Guamo y municipios aledaños, afectando a la población civil, la cual los tenía identificados y lograron su captura con la ayuda de las tropas.
“Estos sujetos se la pasaban robando, intimidando y amenazando a los habitantes de la vereda. Estábamos cansados de la misma situación, de poner demandas y no nos prestaban atención, y por eso los habitantes hicieron justicia por ellos mismos. Se hacían pasar por miembros de la guerrilla, eran tres sujetos, pero uno se voló. La comunidad entregó estas personas a la Policía y la fiscalía”, manifestó un habitante de la vereda en declaraciones entregadas al periodista Álvaro Monroy Callejas.
Por su parte, el teniente Coronel Alberto Acero, comandante del Batallón de Infantería 18 Coronel Jaime Rooke de la VI Brigada del Ejército, destacó el apoyo de la población civil, el cual fue fundamental para lograr dicho resultado operacional y la captura de los supuestos extorsionistas.