IBAGUÉ. Como es su costumbre, Federico Ipúz Andrade salió a caminar por las calles de Ibagué, pero el jueves en la mañana un motociclista lo arrolló, dejándolo con delicadas heridas.
El abuelo, de 88 años de edad, reside en la calle 37A con carrera Décima del barrio Gaitán, de donde partió sobre las 9:00, pero cuando regresaba a su residencia, fue atropellado en la carrera Quinta entre calles 28 y 27 por un motociclista que huyó del lugar.
Un patrullero de la Policía llegó al sitio y con ayuda de la comunidad atendió a don Federico, mientras llegaba una ambulancia.
Los minutos pasaron y la cantidad de ambulancias que suelen llegar a los accidentes de tránsito, no aparecieron.
El uniformado, desesperado al ver al abuelo quejarse y sin ayuda, intentó inmovilizarle la pierna izquierda con un cartón y cinta usada por la Policía para acordonar sitios.
Pese a las insistentes llamadas que se realizaron para que llegara la ambulancia, el patrullero no tuvo otra opción que detener un taxi para llevar a Ipúz al Hospital Federico Lleras Acosta, donde se recupera.
Q’HUBO dialogó con Alfonso Ipúz Vergara, hijo del adulto mayor, quien dijo: “Según mi hermana, él acostumbra a caminar, y a veces va hasta el barrio Belén”, manifestó.
Ipúz Andrade sufrió lesiones en todo el cuerpo, la más delicada fue en la cara por lo que necesitará una cirugía plástica, entre otras para recuperarse.
Q’HUBO quiso hablar con el policía que valerosamente colaboró en el accidente, pero por ‘protocolos’ de la Institución, no le fue permitido.
