IBAGUÉ. En minutos Jair Valencia tuvo que ver como el bus en el que iba era consumido por las llamas que por poco acaban con su vida. Aunque las pérdidas son millonarias, lograron salvar a los pasajeros.
El bus adscrito a la empresa Velotax salió de Cali a las 6:00 de la tarde del sábado, pero algo empezó a molestar y alertó a los funcionarios.
Cuando llegaron a Cajamarca la caja de los cambios seguía molestando por lo que pidieron un transbordo y la empresa lo hizo.
Uno de los conductores trajo el bus hasta Boquerón, sur de la capital del Tolima, donde hicieron el relevo con Jair Valencia, empleado de Velotax hace ocho años.
El hombre vive en el barrio Tulio Varón y era el encargado de culminar el viaje, pero su misión había cambiado, debía llevar el automotor al taller en Bogotá.
A las 2:15 de la madrugada aproximadamente Valencia se subió al bus e inició su recorrido. Pasaron unos 15 minutos y cuando iba por La Variante de Ibagué algo pasó y el problema de la caja de cambios pasó a un cortocircuito en la parte baja del timón.
“Los pantalones se prendieron y me bajé rápido”, contó Valencia.
Y agregó, “donde venga gente se muere toda, porque el carro se prendió de una y no dio tiempo de nada”.
En los casi 40 años que lleva Valencia manejando vehículos de servicio público nunca le había sucedido una emergencia como la que vivió.
