Cine Colombia anunció el desmantelamiento de la que se denominó la sala de cine de más alta tecnología de Latinoamérica, ubicada en el centro comercial El Edén, consecuencia, entre otras cosas, de una imposibilidad de renegociación en el contrato de arrendamiento.
En marzo, tres meses después de su apertura, el Gobierno Nacional canceló todas las actividades públicas y el teatro tuvo que cerrar sus puertas, decisión que sería definitiva; y todo gracias a que de acuerdo con lo dicho por el presidente de Cine Colombia, Munir Falah, en su cuenta de Twitter, entre abril y septiembre la industria de las salas de cine pasó de vender más de $350.000 millones a solo $945 millones.
También a través de la cuenta de Twitter, Falah contó que la empresa se acogió al Decreto 797 del 4 de junio de 2020 que autoriza de manera extraordinaria y temporal la terminación unilateral de contratos de arrendamiento comerciales que no puedan ejercer. Sin embargo, la empresa no encontró respuesta. Construcciones Planificadas, dueño del local, no acordó una fecha de entrega para el local, razón por la cual la exhibidora de películas presentó una demanda arbitral en contra de la empresa.
Falah publicó en la red social “para Cine Colombia el retiro de El Edén es muy doloroso, pues realizamos la mayor inversión hecha en Colombia para un Multiplex y tan solo estuvo abierto al público menos de cuatro meses. Era el único complejo en Latinoamérica que tenía todos los formatos posibles de cine”, la empresa invirtió $30.000 millones.
Ahora, Cine Colombia exige la devolución de los cánones de arrendamiento desde el 14 de marzo hasta la terminación del contrato el 31 de julio. Además, pide a la constructora $11.000 millones por incumplir sus obligaciones derivadas a la terminación del contrato y $807 millones por prima de vinculación y los intereses comerciales moratorios desde agosto hasta que se cierre la transacción.
Esta no fue la única empresa de la industria del séptimo arte que tuvo que cerrar salas de cine a nivel nacional. Natasha Mayungo directora comercial de Procinal, afirmó que se vieron obligados a cerrar la sala del centro comercial Arrecife en Santa Marta porque no llegaron a un acuerdo con el arrendador para renegociar el contrato.
El futuro de las salas de cine es incierto. El Ministerio del Salud expidió la Resolución 1746 del 2020 del que permite la venta de comida y permite el ingreso por grupos hasta de cuatro personas; empresas del sector como Cinemark aprovecharán el beneficio para abrir puertas. Andrea Beltrán, directora de mercadeo de la exhibidora de cine, expresó que están preparados para la reapertura, y que tienen como fecha tentativa tenemos el 12 de noviembre”.
Sin embargo, otros actores de la industria como Procinal, ven el tema de la apertura directamente relacionado con los estrenos de cine. Mayungo, afirmó que “estamos esperando los estudios nos confirmen si van a estrenar películas”.
Esto representa la comida en la industria
Antes de la Resolución 1746 del Ministerio de Salud, las empresas de la industria de exhibición de cine, no veían rentable la apertura de los teatros porque la venta de comida es una parte importante de sus ganancias. Gustavo Palacio, presidente de la Asociación Colombiana de Cine (Acocine), afirmó “la industria genera más de $1 billón anual, el año pasado $652 mil millones fueron de boletería, el resto corresponde a las ganancias por comida”. De acuerdo con la afirmación de Palacio, el segmento de palomitas y dulces pesa 35% de la industria.