El campeón ciclista de Italia, Davide Formolo (UAE Emirates), ganó la tercera etapa del Critérium del Dauphiné este viernes en Saint-Martin-de-Belleville (sureste de Francia), con una treintena de segundos de ventaja sobre el esloveno Primoz Roglic (Jumbo), que sigue liderando la prueba y aumentando su ventaja sobre el colombiano Egan Bernal (Ineos).
Formolo culminó triunfalmente una larga escapada. Por detrás, Roglic se impuso al esprint al francés Thibaut Pinot y al alemán Emanuel Buchmann, quienes ya le escoltaron el jueves en la llegada al Col de Porte.
El colombiano Egan Bernal (Ineos), ganador del Tour de Francia, cedió en los últimos metros y se dejó casi 10 segundos con Roglic.
Formolo logró distanciar a sus compañeros de la escapada formada en el kilómetro 40. El italiano, solo en cabeza en los 66 km finales, afrontó la última subida (14,8km al 6 %) con menos de cuatro minutos de ventaja, pero pudo resistir hasta la meta.
«Formolo no estaba lejos en la clasificación, pero podíamos dejarle irse», estimó Roglic sobre su estrategia en esta etapa.
De 27 años, Formolo quedó segundo en la Strade Bianche a principios de agosto, el mismo puesto que obtuvo en la Lieja-Bastoña-Lieja el año pasado.
«Retomé la temporada con un buen resultado en la Strade Bianche. Fue peor en la Milán-San Remo, donde cometí el error de ir demasiado retrasado en el Poggio, como para poder seguir a (Wout) Van Aert. El de hoy es un triunfo que merezco», afirmó.
Pero más allá del resultado del día, el pulso entre Roglic y Bernal, los dos favoritos para el Tour de Francia, sigue captando la atención. El esloveno continúa sacando tiempo al colombiano, que no tuvo su mejor día y entró en meta en compañía de su compatriota Nairo Quintana, el francés Romain Bardet y el australiano Richie Porte.
«Egan me dijo que no se sentía muy bien. Tuve un día un poco difícil al final, pero no es un problema», señaló uno de sus lugartenientes, el ruso Pavel Sivakov, noveno de la etapa.
«Tenemos tiempo, no tenemos que estresarnos o preocuparnos», apuntó.
Quintana, líder del Arkea-Samsic y noveno en la general, se mostró satisfecho de su prestación:
«Una vez más mis compañeros me pusieron en las mejores condiciones, haciendo un gran trabajo en la cabeza del pelotón, especialmente en la ascensión de la Madeleine. Yo esperaba estar un poco mejor al final», señaló el referente colombiano.
Su compatriota Bernal es séptimo de la general, a 31 segundos del líder. En cualquier caso, plantó batalla, al contrario que su compañero de equipo, el galés Geraint Thomas, distanciado a cuatro kilómetros de la meta y que entró a cinco minutos de Formolo, o que el británico Chris Froome, que quedó descolgado pronto y cruzó la meta a casi dieciséis minutos.
El sábado la cuarta etapa presenta siete ascensiones en apenas 157 kilómetros, entre Ugine y Megève. La subida de Bisanne, de categoría especial, se encuentra a 34 kilómetros de la meta situada en las alturas de Megève.