IBAGUÉ. Desde los garajes de las casas, parqueaderos y conjuntos residenciales son hurtadas las motocicletas que posteriormente son comercializadas en el Tolima.
“Les cambian el color e incluso les ponen placas originales. Cuando el policía verifica la información de la placa no aparece como un vehículo robado, pero al hacer una revisión minuciosa se ve que el número de serie del chasis y otros de identificación no coinciden con la placa pero sí con los de una moto robada y se procede a la captura y la inmovilización”, comentó el coronel Víctor Alfonso Rojas, comandante de la Policía Tolima.
Algunas de las motos son vendidas a bajo costo como vehículos de segunda y personas de buena fe las adquieren sin conocer realmente su procedencia.
Al momento de encontrarse que la motocicleta es robada la persona que tiene la tarjeta de propiedad es la detenida.
Por lo anterior la Sijín recomiendan que se haga una verificación tanto de la placa como de los números de serial, que incluso en algunos casos son borrados y regrabados.
La división de automotores de la Sijín ofrece el servicio de verificación sin costo en el que incluso utilizan químicos para encontrar los número originales.
“Una vez que la persona pierde la moto debe poner el denuncio y dirigirse a tránsito para presentar la cancelación de la matrícula, así no le siguen corriendo impuestos”, agregó el Comandante.
Nazly Pita López
