El Tribunal Superior de Ibagué redujo la pena que deberá pagar el excolumnista y exlíder político, Cristian Eduardo Gutiérrez Castañeda, por el delito de acceso carnal violento en concurso homogéneo, en donde las víctimas fueron tres menores de 15, 16 y 17 años de edad. Ahora el condenado deberá cumplir una pena privativa de la libertad de 28 años, nueve meses y 18 días, pues el ente judicial revocó de manera parcial el fallo impugnado y lo absolvió de los hechos relacionados con uno de los afectados.
El pasado 19 de noviembre de 2019, el Juzgado Sexto Penal del Circuito con Función de Conocimiento sentenció a Gutiérrez Castañeda a una pena de 36 años de prisión, inhabilitación para funciones públicas por 20 años, por hechos ocurridos en el 2014. Además le negó la prisión domiciliaria. Sin embargo, su abogado apeló la decisión señalando que debía ser absuelto de cargos.
No obstante, el Tribunal Superior de Ibagué bajo la ponencia del Magistrado Héctor Hernández Quintero, resolvió solo modificar el fallo con uno de los casos. Sin embargo, el nuevo tiempo estipulado que debe permanecer Gutiérrez Castañeda, corresponde a las otras dos denuncias.
Gutiérrez Castañeda se encuentra prófugo de la justicia.
Los hechos
De acuerdo con las denuncias, a mediados de 2014 los menores de edad, fueron al apartamento ubicado en la carrera Quinta, número 103 – 201, conjunto Caminos del Bosque, donde habían concretado una cita con una supuesta María Fernanda Ruiz Roa. Sin embargo, esto era una farsa planeada por parte del hoy condenado.
Las víctimas indicaron que fueron contactadas por medio de Facebook a través del perfil de María Fernanda Ruiz Roa y/o Julieth Londoño. Sin embargo, esto era una estrategia para que los jóvenes cayeran en la ‘trampa’ de Gutiérrez para así cometer los delitos sexuales.
Cuando los muchachos arribaron al lugar, Gutiérrez Castañeda se aprovechó de ellos, con el argumento de despertar su sexualidad. Supuestamente, este les iba a indicar cómo acercarse para tener relaciones sexuales con María Fernanda y tener el ‘desleche’.
Durante los acercamientos, hizo que los jovencitos le practicaran sexo oral, sostuvieran relaciones sexuales con él, los grabó y tomó fotografías y ‘María Fernanda’ nunca llegó. Luego los siguió contactando y amenazó con subir las grabaciones, y lo hizo durante algunos minutos con un video de uno de los adolescentes. Así ocurrió en dos oportunidades con cada una de las víctimas dentro del proceso.
