IBAGUÉ. Leidy Carolina Bonilla Izquierdo envió su hija de ocho años con un mandado a la casa de su hermana Laura, cuando la pequeña llegó donde su tía encontró con una caja con seda dental y decidió tomarla. Al volver a su casa en el barrio La Gaviota, la menor indicó que se había encontrado el elemento de aseo y Leidy insistió en que lo regresara.
La menor no obedeció y cuando se acercó a la cocina su madre presuntamente la golpeó en repetidas ocasiones con una sartén caliente en la que minutos antes había preparado unos huevos.
En medio de la golpiza, el cónyugue de la mujer y padrastro de la menor intercedió al amenazarla con llamar a la Policía si continuaba.
Tres días más tarde cuando la niña visitó la casa de un tío, los familiares notaron las quemaduras en el hombro y brazo izquierdo que no habían sido atendidas, pues no fue llevabada en su momento a un centro asistencial.
Ante la evidencia de un posible maltrato y el dolor en el hombro de la chiquilla, los allegados hicieron la denuncia ante las autoridades.
La mujer, que se dedica a comercializar joyas y que tiene otros dos hijos de dos y 13 años de edad, fue capturada por el delito de violencia intrafamiliar en su residencia en el barrio La Gaviota.
El Juzgado Segundo de Garantías la dejó en libertad, aunque continúa vinculada a un proceso penal y deberá recibir asistencia psicológica.