El mensaje de solidaridad que Q’HUBO ha extendido a través de sus publicaciones, ha repercutido de manera positiva en la calidad de vida de cientos de personas. Pañales, ropa, alimentos, sillas de ruedas e incluso, dinero en efectivo, hacen parte del apoyo que han recibido varios tolimenses en situación vulnerable. Esta redacción siempre ha trabajado con el corazón por quienes más los necesitan.
Somos de la gente
Q’HUBO es una puerta que se abre para aquellos que se han cansado de golpear en entidades de salud o entes gubernamentales en busca de ayuda.
Hemos recibido, incluso, personas con tutela en mano, que no han podido acceder a lo que por derecho les corresponde y tanto necesitan. Es entonces, cuando Q’HUBO enciende esa luz que sirve para visibilizar los problemas e injusticias de la gente a través de sus publicaciones.
“Luego de ir a la Alcaldía, a la Gobernación y de insistir durante varios meses para que nos dieran la silla neurológica que necesitaba mi hija, sin obtener resultados, aprovechamos una visita de los periodistas con Armando Calle al barrio Las Ferias en la que trataron un problema de comunidad, para comentarles la situación que teníamos, pues somos una familia de escasos recursos y la salud de mi hija se estaba deteriorando sin este elemento”, recuerda Milena Díaz, madre de la joven que en diciembre de 2018 recibió una silla de ruedas que consiguió Q’HUBO mediante una gestión que se efectuó con el apoyo y la solidaridad del Instituto de Rehabilitación del Tolima Ideal, ubicado en la segunda etapa del barrio Jordán.
Todo cambió
Darlin Brillith Campos nació en óptimas condiciones, pero a los tres meses de vida tuvo que ser trasladada a Bogotá, donde permaneció en coma durante varios meses. Desde entonces, depende completamente de su familia, ya que su movilidad se limitó. “Nos tocaba cargarla en todo momento porque no teníamos una silla de ruedas que cumpliera con los requerimientos médicos especiales para ella. Para la época en que Q’HUBO nos ayudó, mi hija iba a cumplir 18 años y pesaba mucho, estuve cerca de herniarme. Sin embargo, gracias al periódico mejoramos las condiciones de vida de ella y de la familia, ya que por fin tuvimos oportunidad de pasearla sin problema, de que estuviera más cómoda y hoy, cuando ya tiene 20 años, seguimos agradeciendo la gestión del diario con nosotros porque la vida nos cambió con ese importante aporte”, agrega la señora Milena.
Cifra
18 de diciembre de 2018 fue la fecha en que la joven recibió la silla de ruedas.
Tome nota
Otras sillas de ruedas se han entregado a través de Q’HUBO, gracias a la donación de lectores que se han conmovido con las historias de cientos de personas que han buscado la ayuda del diario para sobrellevar sus quebrantos de salud y las situaciones complejas a las que la vida los ha enfrentado.