IBAGUÉ. Ayer me fui hasta el barrio Nazareth, preocupado porque los habitantes de la zona me enviaron unas fotos que me dejaron impresionado. Una de las vías principales del barrio está de ¡no te lo puedo creer! Los huecos son tan grandes que hasta a las busetas les da miedo pasar por ahí y peor aún, por las lluvias y al parecer por el daño de una alcantarilla, se inundan tanto que parecen un río en medio de la carretera.
¡Qué problemonón! Atendiendo el llamado de don Álvaro Barbosa Rojas, uno de los habitantes de la zona, llegué hasta allá y al encontrarnos me contó la historia. “El problema que tenemos aquí en el barrio era un huequito que comenzó pequeño y ahora es una ‘piscina’ debido al paso de las busetas, que lo abrió más. Como el tránsito por ahí es tan difícil, los conductores echaron tierra alrededor e hicieron un camino para poder tomar una vía alterna, ya que por el agua y la profundidad del hueco, se les dificulta el paso”, me dijo.
En medio de mi charla con Alvarito, aparecieron otros vecinos del sector que me indicaron que además de la lluvia, la inundación se debe al desbordamiento de las aguas de las alcantarillas aledañas que están tapadas y provocan que la calle permanezca de esa manera, poniendo en riesgo no solo a los vehículos y personas que transitan por el sector, sino además a los niños que juegan en el parque cercano a la carretera, pues con el camino alterno, las busetas quedan ‘pegadas’ al parque.
“Nuestra petición es que nos presten atención y nos ayuden con este problema, necesitamos que los responsables del estado de la carretera tomen las medidas respectivas y nos solucionen esta situación que nos está afectando desde hace más de seis meses”, dijo otro de los vecinos de la zona.
¿Y quién responde? Preocupado por mi gente, me di a la tarea de buscar a los responsables y desde la oficina de comunicaciones del Ibal me indicaron que “La falla es de la vía, no hay problema de alcantarillado ni del acueducto y por tanto no es competencia del Ibal”.
Intenté, entonces, comunicarme con la secretaria de Infraestructura Rocío Lozano, pero hasta ayer en la tarde, nunca me respondió.