Sandra Rodríguez Torres lleva 14 años sosteniendo a su familia con los ingresos que obtiene vendiendo bizcochos, cucas, arequipe, quesillo, entre otros productos tolimenses, en la Variante de Alvarado.
Allí, en esta importante vía, ella y otras personas tienen sus locales. Todo iba ‘viento en popa’, hasta hace unos días, cuando personal de la Concesionaria Alternativas Viales, según la versión de los ciudadanos, les dijo que debían alejarse cinco metros del lugar, fuera del margen de la carretera, porque ellos iban a construir una bahía. Luego les habrían dicho, que lo que construirían serían unos corredores viales.
Sin sustento
De acuerdo con la versión de la señora Sandra y de otros supuestos afectados, si dichos corredores se construyen el negocio se les acaba porque los vehículos no podrían detenerse en el sector.
“Me dijeron que me corriera para atrás, pero en realidad no había espacio, entonces me ubiqué más adelante, es decir, me cambié de lugar. A dos locales que están a unos cuantos metros de nosotros, sí les hicieron bahía y quedaron muy bien ubicados. Aunque primero nos dijeron que nosotros también tendríamos bahía para que los carros parquearan, ahora nos dicen que no puede ser así porque los planos no se pueden cambiar”, señaló la comerciante.
Añadió que ella y otros cuatro vendedores no conocen el trazado del proyecto, pues afirmaron que la Concesión sólo lo socializó con dos personas, dos supuestos líderes. A ellos sí les dejaron la bahía. Nos dicen que tampoco nos pueden reubicar. Estamos defendiendo el derecho al trabajo y el derecho a la igualdad ”, dijo.
Tome nota
Q’HUBO se comunicó con la oficina de Alternativas Viales que tiene la concesión vial del proyecto Ibagué – Mariquita – Honda – Cambao – Líbano – Murillo – La Esperanza, para conocer su versión acerca del caso, no obstante, la llamada no fue respondida.
Cifra
25 familias serían las perjudicadas con los corredores. Los negocios funcionan las 24 horas del día.