Pese a la férrea defensa que hizo el presidente Iván Duque del proyecto de reforma al código electoral que cursa en el Congreso, las críticas de alrededor de este no paran desde los distintos sectores políticos. Quienes están en desacuerdo coinciden en que la renovación es necesaria, pero advierten en que algunos puntos del texto representan un riesgo para la democracia.
En la presentación formal de la nueva cédula digital, Duque aprovechó el escenario para invitar a los congresistas a salir de los debates de coyuntura para dedicarse a sacar adelante la reforma al código electoral que cursa en el Legislativo. Dijo que pese a que algunos no están de acuerdo, el país no puede ‘tirar la toalla’ frente a la necesidad de hacer esta modernización.
La senadora de la Alianza Verde, Angélica Lozano, salió, nuevamente, a criticar la forma en la que se quiere aprobar la reforma. “Quieren radicar ponencia sin reunión de ponentes de proyecto de 300 artículos para pupitrearlos entre velitas y 16 de diciembre. Van con todo y por todo. Ni siquiera permiten que la discusión sea en orden, en marzo ¡Pupitreado ya!”, agregó.
Por su parte, el procurador Fernando Carrillo hizo un llamado al Congreso para evitar que se consagre una oportunidad de fraude y advirtió que no se puede aprobar en 3 semanas una legislación electoral que deja por fuera temas trascendentales como el ajuste a la Ley de Garantías y que otorga facultades inconstitucionales al presidente.
Previo a esta invitación, Carrillo había criticado 10 puntos del proyecto, haciendo énfasis en temas importantes como las cuotas de género. A su Juicio, la experiencia internacional muestra que si las regulaciones sobre la participación de la mujer en el espectro político no están acompañadas de medidas para hacer efectiva su participación, estas se convierten en simples manifestaciones no llamadas a producir efectos reales.
El senador del Partido Liberal, Luis Fernando Velasco, indicó que el proyecto de reforma al código electoral tiene elementos positivos que vale la pena defender, y tiene críticas que vale la pena escuchar, sin arrogancia. “Pido no pupitrearlo porque parecería que se quiere esconder algo mal diseñado, y mejor permitir un buen debate en plenaria para legitimarlo”, agregó.
Rodrigo Lara comparó la actual propuesta de reforma con lo que se sucede en Venezuela. “¿Saben cómo logran cruzar los nombres de los votantes con las bases de datos del programa de distribución de alimentos en Venezuela? Con el sistema de voto electrónico y virtual. Sí, sí, el mismo que impulsa el Gobierno Nacional en el código electoral que se discute en el Senado”, dijo.
El exministro Juan Fernando Cristo indicó que es un grave error hundir el nuevo Código Electoral a estas alturas y perder lo avanzado y señaló que aprobarlo en dos plenarias durante los últimos días tampoco es la solución. Propuso que se aplacen los dos debates finales para marzo, con el objetivo de que este pueda estudiarse a fondo.
El exvicepresidente Germán Vargas Lleras, tildó el proyecto de ‘adefesio’, argumentando que no se ocupa de lo realmente importante, como es garantizar elecciones libres y transparentes, dejando todo lo relevante en manos del Gobierno Nacional, otorgándole facultades extraordinarias.
“Una vergüenza que el Congreso delegue esta responsabilidad legislativa que se extenderá a las plantas de personal para crear, modificar y reclasificar empleos, hacer incrementos salariales y crear varios fondos como el Fondo Rotatorio del Consejo Nacional Electoral, existiendo ya uno en la Registraduría.
Así mismo, el proyecto advierte que en los próximos años el Gobierno queda obligado a incluir en el presupuesto todos los recursos que el registrador considere necesarios para adelantar su gestión y el Congreso no podrá discutirlos ni disminuirlos (art. 262)”, aseguró Vargas en su columna de opinión.
Se espera que la discusión, que tiene mensaje de urgencia del Gobierno Nacional, continúe en las plenarias del Senado y la Cámara la próxima semana, días previos a que el Congreso termine este periodo de la legislatura.