El desorden y las peleas frente a la parroquia es un problema que denuncia el sacerdote.
Etilio Aldana, sacerdote de la parroquia Nuestra Señora del Carmén de Gualanday, dio a conocer su molestia por la presunta falta de control en los negocios que se dedican a la venta de licor.
“No es posible que se registren peleas a causa del alcohol frente a la casa cural, por eso hago el llamado a las autoridades de policía, el alcalde para que tomen medidas frente a esta problemática”, indicó Aldana.
Según la denuncia, esta mala conducta estaría provocando riñas y desorden a altas horas de la noche, fomentando el consumo de alcohol en los jóvenes.
“Los habitantes también están cansados del mal comportamiento de las personas que visitan los bares, porque generan conflictos”, concluyó.
Por ahora, el párroco espera una pronta respuesta de las autoridades competentes para dar solución a este hecho, que se estaría registrando a diario.
FOTO: Párroco denuncia el mal comportamiento de los bares. Suministradas: El Nuevo Día.