REDACCIÓN Q’HUBO qhuboibague@gmail.com
El regalo del Niño Dios que llega a los hogares colombianos el 24 de diciembre, es tal vez el compromiso más importante para los padres en esta época. Puede faltar la cena, las galletas, el vino, pero el detalle que los más pequeños esperan durante todo el año, es
primordial.
Aunque para algunos el ‘Niño Dios’ es puro consumismo, lo cierto es que por estos días la mayoría de padres está corriendo de almacén en almacén, buscando el regalo para sus niños.
Q’HUBO recorrió el Centro de Ibagué para conocer el precio de algunso de los regalos más tradicionales. Aquí le contamos.
Recuerde que entre más sencillo sea el juguete, el niño lo disfrutara más. Para ellos, no es divertido que le digan cómo jugar. Lo que al niño le gusta es crear sus propios escenarios, historias, nombres, usarlo y aventarlo como él quiere.
Las patinetas Scooter
Es uno de los instrumentos más llamativos en la infancia. Las hay para niños de 2 años en adelante. Algunas tienen luces y otras sueltan humo. Es importante que un adulto esté atento a los movimientos del niño si la usa en un parque o espacio abierto. El precio oscila entre 100 mil y 350 mil pesos.
Para los más bebés
Están los juguetes didácticos como animales que tienen luces y sonidos. Estos ayudan a incrementar el aprendizaje y la memoria. Necesitan pilas. En promedio cuestan 35 mil pesos.
Los carros
De impulso se encuentran desde 20 mil pesos. Los de control remoto cuestan de 50 mil pesos para arriba. Los vehículos o carritos alientan el movimiento en los niños.
Las pistas
Un juguete que resulta muy divertido para los infantes se consigue desde 35 mil pesos. Entre los 3 y 4 años, el mundo de los carros, motos, camiones y aviones, expande la imaginación y creatividad de los niños.
Según estudios
Jugar con muñecas, activa distintas áreas del cerebro del niño que permiten el desarrollo de la empatía. Una pareja de muñecos con tetero y chupo, en promedio cuesta 60 mil pesos.
Según expertos
Los dinosaurios se convierten en el medio por el que los niños ejercitan la imaginación. El de la foto vale 60 mil pesos.
¿Sabía que cada vez que su hijo juega ocurre una fiesta química que llena su cerebro de endorfinas y encefalinas, las cuales son las encargadas de reducir la tensión neuronal? Así las cosas, el niño siente calma y felicidad. Los mejores momentos de creatividad se dan en los ratos de juego.