ANTONIO GUZMÁN OLIVEROS
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Durante un cuarto de siglo fue el único espacio con atracciones mecánicas para los ibaguereños, también fue punto de encuentro para muchas personas que querían tener su primera cita o hasta de referencia para los viajeros, que afirmaban: ‘veámonos en la rueda del Éxito’.
La también conocida rueda de Chicago llegó a Ibagué en 1997, cuando el 14 de octubre llegó el primer hipermercado a la ciudad, el recordado Óptimo. A un costado, por la avenida Pedro Tafur, resaltaba en color rojo el enorme y colorido armazón de hierro.
La empresa bogotana Carruseles S.A., que opera desde 1987, la trajo a Ibagué e incluso permaneció en el mismo lugar cuando Cadenalco vendió en 2002 al grupo Éxito, cuyo color amarillo reemplazó para siempre el escudo de Óptimo, el recordado ‘chulito’ rojo.
En 2009, la empresa capitalina decidió poner en venta sus atracciones mecánicas, las cuales tenían en Villavicencio y otras ciudades del País, con el fin de operar solo en Bogotá.
Ese año, un grupo de emprendedores ibaguereños decidió apostarle al negocio y así crearon la Red Colombo Empresarial S.A.S. Así nació Super Park Atractions en 2009.
Cuenta Jairo Osorio, socio y representante legal del grupo, que una vez se hicieron con el control del parque empezaron a realizar una serie de remodelaciones.
“Invertimos un dinero para construir en la mitad del parque un mezanine que sirvió como salón de eventos que alquilábamos para fiestas de cumpleaños, empresariales y de fin de años. Importamos desde China unos videojuegos, también atracciones para menores de dos años
“No era un negocio común y corriente, pero aprendimos sobre la marcha, nos asesoraron y rápidamente logramos mejorar”, narró Jairo Osorio.
El cierre
La pandemia del Covid-19 afectó el tradicional negocio. Sumaron casi dos años sin poder operar, pero aun así se mantuvieron y reabrieron al público.
Sin embargo, llegaría una noticia triste e inesperada: el grupo Éxito, los dueños del predio, les solicitaron el devolución del espacio y tendrían que llevarse todas las atracciones: la rueda volante, los carros chocones y los carruseles.
“Tuvimos que pedirle que nos dejaran otro tiempo, pues se acercaba diciembre, temporada alta y no podíamos perder dinero y también para pensar dónde ubicarlo. Así que el 15 de enero de este año pusimos para siempre los candados”, agregó Osorio.
Luego de una búsqueda, uno de los socios logró que Lagos Club Comfatolima les diera un espacio para ubicar allí lo que será el nuevo parque estacionario. La fecha de apertura no se conoce. Deben adecuar los terrenos y construir los salones donde quedarán, entre otras, las famosas ‘maquinitas’.
“Quedan muchos recuerdos, estamos hablando de un parque que funcionó desde el año 97, toda una generación de ibaguereños que llegaron con sus padres, gozaron y celebraron sus cumpleaños”.
Por supuesto hubo tristeza en los colaboradores, la mayoría jóvenes estudiantes universitarios que se quedaron sin ese ingreso económico, pues un fin de semana contrataban entre 12 y 15 personas.
Apoyo a estudiantes
Cuenta Jairo Osorio, que una de las condiciones de los socios era contratar jóvenes que necesitaran pagar sus estudios, que cuando salieran de laborar del parque ya fueran profesionales universitarios.
“Tuvimos muchachos del Sena, Universidad del Tolima, Uniminuto, y muchos terminaron sus carreras y eso fue satisfactorio porque se les ayudó en la parte económica; siempre fuimos legales en pagar todo lo de ley. Una satisfacción que hemos tenido”, aseguró el empresario.
Quizá por lo anterior, el día del cierre muchos quedaron muy afectados, pero esperan que pronto reabra las puertas Super Park Atractions y los ibaguereños vuelvan a disfrutar de la rueda volante.
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