IBAGUÉ. Habitantes de los barrios aledaños al Cementerio La Milagrosa en El Salado, están inconformes con la construcción de un horno crematorio, similar al de Los Olivos, que está a las afueras de Ibagué. Manifiestan que éstos generan contaminación y problemas de salud.
En la mañana de ayer realizaron una reunión en la Iglesia del Cementerio para socializar el proyecto, pero no asistió la mayoría de los habitantes.
De las autoridades convocadas, solamente acudieron los delegados de la Corporación Autónoma Regional del Tolima, Cortolima, y otro de la Secretaría de Planeación de Ibagué.
Pedro Castellanos, Fiscal de Asojuntas de la Comuna Siete y presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Alberto Lleras, afirmó: “Nos enteramos de los problemas en Bogotá con los cementerios dentro de la ciudad, y no nos vamos a prestar para ponerle un problema más a Ibagué”.
Además, Castellanos dice que también hay contaminación por aguas putrefactas y que genera la presencia de águilas negras. Igualmente, quieren que el cementerio sea encerrado por otros peligros que representan para los niños.
ESTÁ EN EVALUACIÓN
Según Rodrigo Hernández, subdirector de calidad de Cortolima, la autoridad ambiental hizo unos requerimientos que a la fecha están bajo evaluación. “Están haciendo un estudio y esperamos los resultados para analizar si hay contaminación o no, porque la empresa está solicitando el permiso de emisiones”. El director de la Corporación, Enrique Cardoso, afirmó que la revisión es minuciosa debido a que los barrios están muy cerca al Cementerio y eso debe ser tenido en cuenta.