IBAGUÉ. Aunque a Alan Padilla Mora su tía le salvó la vida el pasado miércoles su luz finalmente se apagó en esta tierra en horas de la tarde del domingo.
Historia. La capital tolimense una vez más se siente consternada porque la cifra de menores de edad que se han suicidado cada día aumenta.
Alan, quien era estudiante del colegio Inem Murillo Toro, ingresó al hospital San Francisco sobre las 11:50 p.m. en delicadas condiciones de salud luego que una familiar lo encontrara suspendido de una cuerda.
De acuerdo con el comandante de la Policía Metropolitana, coronel Carlos Hernán Camacho, el niño fue remitido a la clínica SaludCoop en la Calle 60 y los motivos por los que Padilla habría tomado esta fatal decisión eran materia de investigación. Sin embargo, señaló que al parecer se trataría de problemas familiares.
Pero después de cinco días de hospitalizado Padilla, quien residía en la calle 21 número 5-92, falleció de un paro cardiorrespiratorio sobre las 4:20 de la tarde.
