IBAGUÉ. Jaír López recibió la noticia del fallecimiento de su hermano Aldemar en el accidente del helicóptero en zona rural de Teorama, Norte de Santander, a través de otro familiar ayer en la mañana, cuando se encontraba en su vivienda en Villahermosa, Tolima.
Un sobrino que también trabaja en la empresa Servicios Aéreos de Ibagué, Sadi, donde laboraba la víctima, le confirmó que el piloto de la aeronave que se precipitó a tierra, era su hermano.
Aunque aún no conoce las verdaderas causas de lo que ocurrió, López decidió esperar a que las autoridades esclarezcan lo sucedido, y mientras tanto recordar a Aldemar como uno de los mejores pilotos del País.
Sin embargo, dijo estar seguro que no hubo falla por parte de su allegado en el vuelo, y cree que fue por esquivar algunas balas que se enredó con las cuerdas y se accidentó.
“Era piloto y jefe de seguridad de esa empresa. Tenía el récord de vuelo en helicópteros de la Fuerza Aérea, y fue de los más experimentados y respetados”, dijo.
Y agregó: “Se sentía muy amañado en Sadi, desempeñando esos cargos. Es decir, él murió en su ley porque le gustaba mucho pilotear helicópteros”, puntualizó.
Hubo cuatro muertos más
Según reporte de las autoridades, el helicóptero era de tipo Eurocopter civil de matrícula HK – 4866, afiliado a la empresa petrolera Petronorte, en esa zona. La precipitación ocurrió 15 minutos después de haber iniciado el vuelo. El coronel (r) Aldemar López falleció junto a otros cuatro operarios que se trasladaban para reparar un tramo del oleoducto Cañón Limón – Coveñas, que fue atacado por el Frente 33 de las Farc. Al cierre de esta edición, fueron identificados el técnico Darío Báez y el copiloto, capitán Iván Rossi.
