IBAGUÉ.Mario Quiñones Sierra, natural de Ortega al sur del Tolima, y soldado profesional, fue una de las 12 víctimas del ataque del Frente 59 de las Farc, a un grupo de militares que prestaba servicio de vigilancia a técnicos que reparaban torres de energía eléctrica en el corregimiento La Majayura, zona rural de Maicao en La Guajira, límites con Venezuela.
Marina Sierra, madre del militar, quien reside en el barrio Caracolí de Ortega, en conversación telefónica con Q’HUBO refirió: “Era un buen hijo, preocupado por sus hermanos y su bebé de ocho meses de edad”, dijo la acongojada mujer.
Sierra recordó que su hijo celebró el cumpleaños número 25, el pasado 28 de enero con toda la familia cuando se encontraba de vacaciones, “le preparé caldo de pollo, comió torta, tomamos cerveza y vino”, dijo.
Y agregó: “La última conversación que tuvimos fue el domingo en la tarde, hablamos de un problema que teníamos en la finca. Además comentó que estaba acabado, pero entusiasmado por venir a visitarnos en dos semanas cuando salía a vacaciones”, puntualizó la mamá.
Quiñones Sierra, quien según su progenitora recibió una ráfaga por la espalda y esquirlas en la pierna izquierda, trabajó como ‘cotero’ y carretillero en su pueblo natal, luego prestó servicio militar y se enroló como soldado profesional, para poder comprarle una casa y colaborarle a sus hermanos.
