EFE
Llevaba partido y medio Inglaterra sin echarse nada a la boca. Ni un simple gol. Estaba sumida en el sopor hasta que apareció Marcus Rashford, el hombre que alimenta a niños de su país, para anotar un doblete, incluido un golazo de falta, y comandar el triunfo ante Gales que metió a su nación en octavos como primera de grupo (0-3), y ahora se medirá con Senegal.
El futbolista criticado por ciertos sectores de la sociedad inglesa por inmiscuirse en política y luchar por los niños desfavorecidos, acalló a la masa con una actuación sobresaliente y uno de sus mejores partidos desde que viste la camiseta de los ‘Tres Leones’. “Yo estoy listo”, dijo en la previa, cuestionado por el cansancio y la apatía de Harry Kane contra Estados Unidos.
Él creció en las afueras de Manchester, en una familia humilde, sostenido por su madre; y por eso, cuando vio que el Gobierno británico cortaba las ayudas a los menores desfavorecidos durante la pandemia, puso el grito en el cielo y convenció a políticos para que dieran marcha atrás. Esto le ganó la amistad de muchos y el odio de unos pocos, que pensaban que su mal rendimiento en el campo y el fracaso del Manchester United estaban ligados a su buen corazón.
Ante Gales, enfrente de seguramente varios de esos que le señalaron, Rashford cogió la pelota con personalidad a los 50 minutos. Era una falta a 25 metros de la portería, perfecta para Kieran Trippier, que no estaba en el campo como en aquella semifinal contra Croacia en Rusia.
Empeine, disparo seco. Buscaba la escuadra y la encontró. Golazo para toda Inglaterra.
El tanto anulaba a Gales, que necesitaba remontar, pero los de Robert Page, con un Gareth Bale que dio la espantada al descanso, seguramente lesionado, no tuvieron tiempo ni para digerir el 0-1.
Rashford, otra vez, robó la pelota en banda, el esférico le cayó a Kane, que volvió a ejercer de catalizador. Echó una carrera, puso un pase fuerte al segundo palo y Foden apareció para acomodar el cuero en la jaula.
Al futbolista del United aún le quedaba un plato por servir. Esta vez tirando de individualismo, de regate y desborde. Caracoleó dentro del área, tiró raso y la pelota pasó entre las piernas de Ward.
Noche magnífica para Rashford, que cuando se fue se llevó el abrazo de Southgate. Ayer sí le salió bien la apuesta al técnico inglés. Ayer Rashford sí le cayó bien a toda Inglaterra. Hoy no se llevará críticas.
GRUPO B
1. Inglaterra
7 pts. (7)
2. USA
5 pts. (1)
3. Irán
3 pts. (-3)
4. Gales
1 pts. (-5)