IBAGUÉ. Testimonios escalofriantes de Cindy Katherine García Molano, de 23 años, refirió la Fiscalía al acusar de tortura, trata de personas, secuestro y lesiones personales al matrimonio de Olma Marlene Zapata Marín y su esposo Luis Evelio Villa Restrepo, al igual que su cuñado Arcesio Villa Restrepo, quienes esclavizaron a la humilde mujer durante siete meses en una finca en Fresno.
Por ejemplo, ella cuenta que una vez que se le ahumó la sopa, la cruel administradora le pegó con un cucharón y le fracturó los dientes. En otra ocasión la empujó al fogón y le hizo quemar las manos. Sólo le daban agua, la forzaban a comer picante y cuando vomitaba, la maltrataban y la hacían comer su vómito.
Arcesio era quien más se enceguecía. Cuando se molestaban le pegaban puños en los senos, la vagina y las orejas se las deformaron por los golpes que le propinaban hasta hacerla perder el sentido, pero cuando la llevaron al hospital dijeron que era por picaduras. No la dejaban dormir echándole agua, o se le permitían pero de pie, y de castigo la ponían a barrer en la madrugada.
La amenazaban con soltarle los perros ‘rottweiler’ si se salía de la finca, la mantenían desnuda para hacerla pasar por loca a las visitas, la atemorizaban con jeringas y con internarla en un manicomio, tampoco le permitían asearse, al punto que la boca se la bañaba con ceniza.
Cuando Cindy Katherine fue rescatada, su aspecto era de una indigente y estaba absolutamente traumatizada, según narró la Fiscal Séptima Especializada en la audiencia de formulación de acusación ante el Juez Segundo Penal Especializado de Ibagué.
La joven trabajaba como manicurista donde su abuela y allí conoció a la desalmada ‘bruja’ que le ofreció trabajo y vivienda con su novio. Una vez en la finca ‘El Revólver’, le quitaron la ropa, los papeles y su celular, mientras a doña Mercedes García de García le decían que su nieta no quería hablar con la familia.
Fue Doris Zapata, hermana de Olma Marlene, la que alertó a la abuela advirtiéndole que Cindy Katherine estaba en peligro. El día que el Comisario de Familia de Fresno se presentó a la finca, la joven fue escondida y le dijeron que no saliera porque habían llegado del manicomio a llevársela, pero finalmente pudo ser rescatada.
Según manifestó la Fiscalía, los hechos superan a las palabras de la víctima y las pruebas contra la administradora de la finca, su esposo y su cuñado son contundentes, quienes por no respetar la condición de ser humano de la joven podrían pasar mínimo 40 años en la cárcel.
