IBAGUÉ. Las sonrisas que durante varios años Barnie le trajo a David Andrés Rodríguez Castro, quedaron en los mejores recuerdos de la familia, luego de que el niño falleciera presuntamente por un dengue.
Carmen Elisa Castro, madre del menor, relató a Q’HUBO que el pequeño presentó fiebre el jueves de la semana anterior por lo que fue necesario llevarlo a consulta: “Le di medicamentos, mejoraba unas horas y volvía a sentirse mal hasta que lo llevé al médico y se alivió el fin de semana”.
“El domingo le hice otro cuadro hemático y las plaquetas estaban bajitas. Nuevamente a observación y en la consulta vomitó. Al final se le vio sangre y lo hospitalizaron”, explicó Elisa, abrazando al peluche preferido de su hijo.
Así estuvo varias horas y por la situación crítica, Rodríguez Castro fue trasladado de Saludcoop a la Unidad Materno Infantil del Tolima, UMIT, cerca al Centro Médico Javeriano: “El servicio fue muy bueno. Los pediatras estuvieron pendientes de mi hijo. Lo que se necesitara estaba a la mano. No tengo queja”.
Agregó: “Si mi hijo falleció es porque mi Dios lo necesitaba en el cielo y ahora es un angelito que nos ilumina, más no por negligencia. Los profesionales nunca dejaron solo a mi hijo y les agradezco”.
Por su parte, el secretario de Salud Departamental, Ricardo Rivas, explicó que no se puede decir que el deceso se debe a un contagio de dengue, ya que se deben esperar los resultados que son los que finalmente confirmar las causas.
Esperó a la tía
Tras varios días bajo observación y procedimientos, el menor falleció el miércoles en la tarde: “Le hicieron una incisión cerca al pulmón para que drenara el líquido y en ese momento le dio un paro. Afortunadamente resistió y logró controlarse. Yo estaba contenta”, aseveró la mamá.
Cuando Carmen Elisa creyó que todo estaba superado, llegó lo más difícil: “Tuve un momento de felicidad, entré a verlo, le besé la mano y le dije que había llegado la tía ‘Celita’ que es una de sus adoradas, y en ese momento falleció”.
David Andrés era el menor de dos hermanos, y uno de sus proyectos era aprender a tocar la batería. En el colegio era un chico aplicado y siempre motivó a sus compañeritos: “Él era la alegría del salón y fue dedicado al estudio”, puntualizó Carmen Elisa.
NO OLVIDE: David Andrés cursaba el grado tercero en el colegio Juan C. Rocha.