Cansados manifestaron estar los vendedores de las casetas comerciales ubicadas sobre la carrera Quinta, pues los delincuentes los tienen de ‘pinta’, y en lo corrido del año, en varias oportunidades han sido víctimas de estos delincuentes, quienes se les han llevado toda la mercancía de sus pequeños locales.
Jaime Romero, ha sido víctima de los delincuentes en dos oportunidades, Q’HUBO dialogó con él para conocer la situación a la que se enfrentan estos pequeños comerciantes.
Hacen de las suyas
Don Jaime, conocido como ‘El Pibe’, quien también labora como voceador de prensa, le contó a Q’HUBO que el pasado cuatro de diciembre, cuando llegó a la caseta, donde vende dulces, periódicos, y otros productos para sostener su hogar, estaba casi desocupada, pues los delincuentes dañaron una de las puertas y huyeron con un botín de más de dos millones de pesos, entre los elementos hurtados, estaban varios productos de catálogo que la familia vende en este lugar.
Pero al parecer, esta no ha sido la única vez que ‘El Pibe’ es víctima de los delincuentes, pues el pasado 30 de agosto, cuando se inició el proceso de reapertura comercial, los ‘cacos’ también rompieron la parte posterior de la caseta y se llevaron más de 500 mil pesos en mercancía.
Los tienen azotados
Según la información suministrada por Jaime, los delincuentes tienen azotados a todos los comerciantes de la zona, pues ya son varios ciudadanos que trabajan en estas casetas ubicadas sobre la carrera Quinta que han sido víctimas de los ‘pillos’, quienes presuntamente con barras, estarían dañando las puertas de los locales para cometer sus fechorías.
Según el denunciante en los últimos meses alrededor de siete casetas han sido violentadas por estos bandidos. Los afectados presumen que los hurtos están siendo perpetrados por un mismo grupo, pues al parecer, utilizan la misma modalidad para violentar las puertas, otra situación que les preocupa es que los residentes cerca a sus puestos de trabajo no se percaten de la situación o no den aviso a las autoridades policiales, para tratar de evitar que los hurtos continúen en la zona.
Cifra
2 millones de pesos fue avaluada la mercancía hurtada en el último robo.
