Q’HUBO conoció que tres niños, entre los tres y los seis años, estaban en la casa de Álvaro Mutis, en Coello Cocora, cuando el lugar se prendió en llamas. Al parecer, los niños jugaban con candela, cerca a la estufa, y esto habría desencadenado la conflagración.
Según algunos vecinos, el hombre que estaba con los menores, dormía. Por fortuna, todos alcanzaron a salir entre el humo y las llamaradas.
Los habitantes del caserío le hacen un llamado a las autoridades para que verifique las condiciones en que viven los menores. Es de recordar, que el incendio ocurrió la mañana del domingo y dejó pérdidas materiales valoradas en unos 30 millones de pesos.