El Nuevo Día dialogó con María Constanza Meza Elizalde, ingeniera forestal de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, magister en Manejo, Uso y Conservación del Bosque de la misma institución y PhD en Ciencias de la Universidad Nacional de Colombia. Actualmente es la subdirectora para la Reducción del Riesgo de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres.
El Nuevo Día: Venimos de enfrentar varios incendios forestales en Tolima y otros departamentos durante los últimos meses y la UNGRD estuvo muy activa en la atención de estas emergencias ¿Qué aprendizaje nos dejó dicha temporada y cómo nos estamos preparando para otra eventualidad como estas?
María Constanza Meza Elizalde: Realmente lo que pasó durante el mes de octubre en el Tolima fue algo sin precedente. Se registraron incendios de unas extensiones que no se habían registrado previamente en el departamento. De hecho, entre el Huila, el Tolima y el Cauca en esta temporada se quemaron más de 60 mil hectáreas de bosque y eso nunca se había presentado. Y eso es lo que se llaman unos incendios de grandes magnitudes, de grandes extensiones o grandes incendios, que por la extensión, pues realmente superan las capacidades de atención de los cuerpos de bomberos locales y se requiere desplegar un apoyo operativo muy grande.
Entonces, ahí la Unidad como coordinadora del sistema, apoyó toda la articulación para que se pudiera atender esos incendios. Precisamente, debido a los incendios que se presentaron, estamos hoy en un Primer Seminario Internacional para la gestión de grandes incendios forestales, es decir, esos incendios que por su proporción, pues digamos, son más complejos de manejar. Y en este Seminario Internacional lo que hicimos es que trajimos experiencias internacionales y nacionales para trabajar temas de prevención, de cómo también manejar y administrar la emergencia y la recuperación de las áreas afectadas.
END: Algunas entidades aseguran que alrededor del 25% del bosque seco tropical del Tolima se perdió a raíz de los incendios forestales de los últimos meses ¿De qué manera contribuye la UNGRD a recuperar este ecosistema tan importante?
M.C.M.E.: Todavía no sabemos si se perdió porque se requiere hacer una evaluación precisamente del daño. Una característica es que sabemos que se afectaron grandes extensiones de bosque, pero hicimos unos recorridos preliminares. Hay zonas donde el incendio fue de muy baja intensidad, es decir, que pasó muy rápido, se quemaron algunas hojas, pero, digamos, no hubo como tal una mortalidad y eso pues hace que el bosque se pueda recuperar, pero otras áreas donde el fuego sí fue más intenso, se pudo generar mortalidad y la recuperación puede ser más difícil.
Hoy estamos aquí con una de las expertas, la doctora Ángela Parrado Roseli de la Universidad Distrital, que lleva investigando el fuego en el bosque seco durante muchos años y ya precisamente nos va a dar unas pautas. Pero es muy acelerado todavía decir que se perdió el bosque porque no se han hecho los análisis. Ahora, hay que aclarar algo,
nosotros somos el Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, nos encargamos de temas de preparación, prevención, ya como tal la respuesta, pero pues también ya le corresponde a las autoridades ambientales tomar medidas sobre el manejo de estas áreas que se vieron afectadas. En este caso, pues claramente Cortolima, como la autoridad ambiental que funge aquí en el departamento y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.
END: Vimos que una de las principales causas de los incendios forestales fueron las mal llamadas ‘quemas controladas’ ¿Qué hace falta para poner en cintura a los responsables de este tipo de prácticas, tal vez una legislación más severa o mayor compromiso de las CAR y demás autoridades en la vigilancia?
M.C.M.E.: Es muy importante porque creo que hay una desinformación al respecto, nosotros tuvimos la oportunidad de sobrevolar todas las áreas, nosotros en Colombia no tenemos una figura de peritaje muy establecida para analizar las causas de los incendios forestales, pero dentro de lo que pudimos analizar las causas no fueron quemas controladas que se salieron de control, entonces yo creo que no es justo de pronto emitir unos juicios de valor precisamente hacia campesinos o indígenas, porque en los sobrevuelos lo que identificamos es que se quemaron áreas de bosque y las áreas adyacentes que eran los territorios agrícolas no estaban quemados, si hubiera sido una quema controlada que se sale de control, pues el territorio agrícola estaría quemado y se vería como también se quema el bosque, pero eran solo las áreas de bosque.
Pudieron ser múltiples causas, pero sin duda también hubo un factor intencional, incluso algunos cuerpos de bomberos que atendieron la emergencia encontraron bidones de gasolina, cúmulos de combustible, no sabemos el propósito de esta organización para generar estas quemas y establecieron las denuncias correspondientes, pero el tema con las denuncias es que no fueron capturadas en flagrancia las personas que hicieron esta actividad. Otra de las causas probables, pero como repito no está investigada por un perito que lo diga, pero digamos que sí se ha reportado antes en el Tolima, es que cuando no se hace mantenimiento en las áreas de servidumbre debajo de las líneas eléctricas se pueden generar incendios porque la vegetación está en unas condiciones muy secas que hace que estuviera muy expuesta a que se pudieran propagar los incendios forestales, pero realmente simplemente para aclarar pudo alguno de los incendios ser por una quema controlada que se saliera de control, pero la gran mayoría no fueron generados por esta práctica.
END: Desde la dirección que usted tiene a cargo ¿Qué acciones se adelantan para reducir el riesgo de incendios forestales en una región como el plan del Tolima, territorio con características (clima, ecosistema, etc), que pueden desencadenar este tipo de emergencias con facilidad en el futuro.
M.C.M.E.: Como país tenemos muchos retos porque lamentablemente la parte de incendios forestales siempre se ha visto más desde la atención de la emergencia que claramente es muy importante, pero todavía tenemos muchas oportunidades de mejora en la parte preventiva, entonces sí estamos haciendo unos esfuerzos de reducción en el marco de esta nueva administración y consisten en varios. Uno, fortalecimiento de capacidades, por ejemplo aquí tenemos cuerpos de bomberos y coordinadores departamentales de varias partes del país, porque sí creemos que tenemos que gestionar mejor las emergencias, de hecho el miércoles tuvimos una simulación de cómo atender un gran incendio para mejorar como es nuestra logística operativa para ser más eficientes en la atención, pero también tenemos otras acciones, vamos a hacer unos equipos de gestión de grandes incendios forestales con comunidad internacional que van a venir a incorporarse con nosotros durante las atenciones de la emergencia, porque hemos identificado que tenemos cosas de mejora como tener analistas de incendios forestales o tener una mejor coordinación tierra aire cuando se requieren medios aéreos para la atención.
Estamos trabajando mucho en formación con el Sistema Nacional de Gestión del Riesgo y también vamos a iniciar un proceso con el Sistema Nacional Ambiental con los guardaparques, para formarlos también como brigadistas y que puedan ser más eficientes en la respuesta. Tenemos unas deudas si es que se confunde la prevención de incendios forestales con la prohibición de uso del fuego y no, tenemos que concientizar a los territorios que tienen que hacer por ejemplo gestión de cargas de combustible para reducir la ocurrencia de incendios o la magnitud de los mismos.
END: ¿De qué manera los gobiernos locales y departamentales pueden ayudar a reducir el riesgo de incendios forestales? ¿Hace falta más pedagogía, conciencia o vigilancia?
M.C.M.E.: Falta todo, falta más conciencia, falta más vigilancia, pero precisamente también somos conscientes de que no se les ha dado las herramientas para que tomen mejores decisiones entonces estamos fortaleciendo capacidades. Por ejemplo, aquí teníamos unas charlas del monitoreo, como monitorear condiciones previas al incendio para identificar qué zonas están más expuestas y más vulnerables y de pronto focalizar en esas áreas algunas actividades de prevención, también es muy importante toda la parte de educación ambiental, de conciencia con las comunidades pero pues es un proceso largo que lo importante es que hemos dado inicio para fortalecer las capacidades territoriales para la gestión de incendios.
END: ¿Cuál es el objetivo principal del Primer Seminario Internacional de Gestión de Grandes Incendios Forestales y por qué se realizó en Ibagué?
M.C.M.E.: El objetivo precisamente es como que tengamos mayores herramientas en todas las etapas, la parte preventiva, la parte de administración de una gran emergencia y la parte de evaluación y recuperación de las áreas afectadas, no queremos copiarnos de modelos de otros países, pero si consideramos que hay experiencias valiosas de las cuales podemos tomar insumos para adaptar en el territorio, también tenemos expertos nacionales y la idea también es escuchar a los cuerpos de bomberos desde su realidad, que son los que están gestionando la emergencia, para identificar qué otros temas necesitamos trabajar mejor para administrar estas emergencias.
Durante la tensión de los incendios forestales que se presentaron en el mes de octubre, el departamento del Tolima fue uno de los más afectados, principalmente por ejemplo el municipio de Natagaima, pero también vimos muchos incendios en Alpujarra y en otros municipios. Coordinamos con la gobernación del Tolima esfuerzos para poder mejorar la situación, entonces la gobernación del Tolima nos dio la apertura al departamento y a la ciudad de Ibagué para que pudiéramos de forma coordinada traer este evento aquí a la ciudad.
END: ¿Qué actores participan del evento y que se espera obtener al finalizar en materia de gestión del riesgo de incendios?
M.C.M.E.: Aquí están participando principalmente cuerpos de bomberos, porque como mencioné cuando está la emergencia ellos son los que comandan el incidente, los que administran la emergencia. Entonces tenemos cuerpos de bomberos del Tolima, del Huila, pero también trajimos cuerpos de bomberos de otras partes del país que son los que principalmente se mueven por el territorio nacional apoyando a cuerpos más pequeños. Tenemos por ejemplo los bomberos de Riosucio, al cuerpo de Bomberos de Bogotá, tenemos cuerpos de Bomberos del Amazonas y tenemos también algunos coordinadores departamentales de gestión del riesgo de desastres y otros miembros del sistema. Entonces tenemos también Fuerza Aérea, Ejército, Policía Nacional, entre otros.
Esperamos que salgan con las capacidades un poco más fortalecidas, pero también estamos en ese proceso precisamente de identificación de debilidades para ver qué oportunidades de mejora podemos trabajar desde la unidad.
FOTO: María Constanza Meza Elizalde, subdirectora para la Reducción del Riesgo de la UNGRD. Suministradas/ El Nuevo Día.