REDACCIÓN Q’HUBO qhuboibague@gmail.com
La demora en los cambios que el Gobierno nacional hará al programa de Vivienda Mi Casa Ya y la decisión que tomaron algunas constructoras de subirle el valor a apartamentos tipo VIS (Vivienda de Interés Social), están alejando a decenas de ibaguereños del sueño de tener casa propia.
Q’HUBO diálogo con varios afectados, quienes mañana llevarán a cabo un plantón frente a la Alcaldía.
Con tristeza, algunos desistieron del proyecto, pero las constructoras no les han devuelto el dinero. Otros, están tratando de gestionar préstamos bancarios en el que quedarían pagando cuotas mensuales de entre 800 mil y un millón 500 mil pesos durante 20 años. Conozca algunas historias.
Alexandra Maldonado, es una emprendedora que en agosto de 2019 separó un apartamento en el proyecto Fontana Campestre. En ese momento, el precio pactado entre ella y la constructora Proyectamos y Edificamos fue de $127 millones. Como en la mayoría de los proyectos de vivienda de interés social, se debía aportar el 30 por ciento del valor del inmueble en cuotas mensuales.
De manera muy cumplida, según documentos que ella aportó a esta redacción, a pesar de la pandemia, durante 37 meses consignó 700 mil pesos para un total de 28 millones 200 mil pesos.
Según su testimonio, la firma de las escrituras se programó para el 4 de noviembre de 2022, pero la Constructora postergó la diligencia.
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Subió $13 millones
En 2022 tenía todo listo. El crédito del banco fue aprobado, fue beneficiaria del subsidio de la Caja de Compensación y esperaba el visto bueno para el subsidio de Mi Casa Ya. No obstante, el mensaje de la Constructora detuvo el proceso.
“En enero de este año, los asesores de la Compañía, de manera sorpresiva, informaron que el apartamento había quedado en 156 millones de pesos. Esta semana, en un comunicado oficial, dieron a conocer que el apartamento queda en 121 salarios mínimos legales vigentes, es decir, más de 140 millones de pesos. Olvidando que la promesa de compraventa se firmó por 127 millones de pesos”.
Teniendo en cuenta que las políticas de Mi Casa Ya, cambiaron, Alexandra ya no recibiría el subsidio de 30 millones de pesos. Así las cosas, necesitaría tramitar un préstamo bancario por 82 millones de pesos.
“Si me aprueban el crédito, quedaría pagando cuotas mensuales de un millón 400 mil pesos durante 20 años. A largo plazo, el sueño de tener casa propia me saldría en más de 330 millones, una suma exagerada porque estamos hablando de Vivienda de Interés Social. No soy una persona adinerada, soy una persona trabajadora que quiere dejar de pagar arriendo”, cuestionó.
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Necesita la devolución
En enero de 2021, Andrea Ríos separó un apartamento también en Fontana Campestre. En esa fecha, el inmueble sobre planos tenía un valor de 128 millones de pesos. Ella muy juiciosa, consignó 20 millones 750 mil pesos a la fiducia a través de pagos mensuales de 750 mil. “Mis ilusiones quedaron en el piso. Sin justificación, la constructora subió el precio a 140 millones de pesos y como no puedo acceder al subsidio de Mi Casa Ya, decidí desistir. Radiqué la solicitud, pero hasta el momento no he tenido respuesta. La verdad es que necesito mi dinero. El interés de los bancos es muy alto y no me prestarán 120 millones de pesos. Da tristeza que tanto el Gobierno como los empresarios jueguen de esa manera con las personas”, puntualizó.
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“Lea la promesa de compraventa”
Q’HUBO dialogó con el abogado Joaquín Torres, conocido como el Rey de las Tutelas. El experto indicó que lo primero que hay que tener en cuenta en estos casos, es el contrato de promesa de compraventa que los compradores firmaron con la constructora. “El 100 por ciento de esos contratos en vivienda VIP o VIS establecen que el precio del apartamento es el valor del salario mínimo mensual legal vigente al momento de la firma de la escritura pública. Entonces, si la promesa de compraventa está estipulado que el valor del apartamento es de XX salarios mínimos legales mensuales vigentes al momento de la firma de la escritura pública de compraventa, no hay cómo pelear, porque se trata de un acuerdo entre el comprador y la constructora que ambos tienen que respetar”, dijo.
Y añadió: “Lo que pienso como abogado constitucionalista es que todos los que en Colombia en este momento tienen firmadas promesas de compraventa de apartamentos o casas VIP o VIS y están presentando ese problema, deben unirse y exigirle al Gobierno que les asegure el subsidio de Mi Casa Ya, o cualquier otro subsidio posible, atendiendo que se trata de personas en condición de debilidad manifiesta, por carecer de los recursos suficientes para adquirir una vivienda sin subsidio”.
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Invirtió todo
Marly Castro, es una madre cabeza de familia y empleada de una ferretería. En noviembre de 2019 separó un apartamento cuyo valor era de 127 millones de pesos. “Me apreté el cinturón, me privé de muchas cosas para cumplir con el 30 por ciento. Las primas, cesantías, ahorros se fueron para la constructora. En mayo del 2022 firmé la promesa de venta. La firma de las escrituras quedó para octubre (de 2022 ), pero no se llevó a cabo. Hace poco de manera oficial, la constructora informó que el precio del apartamento quedaba en 140 millones de pesos. El banco no me va a prestar. Además, hay que conseguir dinero para los acabados, debemos pagar servicios públicos y administración. La solución que la constructora da es que nos devuelven el dinero, sin embargo, ¿Dónde queda todo el tiempo que esperamos?, ¿Nos van a pagar intereses por la plata que dimos?”, indicó.
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El sueño se les escapó de las manos
El Ministerio de Vivienda anunció cambios para el programa Mi Casa Ya. Ahora, se tomará como referencia el parámetro de categorización del Sisbén IV, en el que se contempla el ingreso familiar y la capacidad de pago y el valor del inmueble elegido. Asimismo, las viviendas en zonas rurales entrarán al programa y se dará preferencia a las solicitudes de víctimas de violencia y madres solteras; trabajadores informales, comunidades étnicas y personas con discapacidad. Aunque el decreto no está listo, algunas personas que tienen todo listo para recibir la ayuda, creen que el nuevo proceso no los beneficiará.
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Datos
– Q’HUBO se comunicó con la constructora Proyectamos y Edificamos para conocer la versión de la compañía acerca del tema. Aseguraron que remitirían la inquietud a la persona encargada, pero al cierre de esta edición, no habíamos obtenido comunicación alguna.
– Mañana a las 7 de la mañana, ibaguereños afectados por la no entrega de subsidios de vivienda llevarán a cabo un plantón frente a la Alcaldía.
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