IBAGUÉ. El 23 de agosto Freddy Díaz se dirigía a su hogar en una motocicleta tras una jornada de trabajo. A la altura de El Carnaval del Pollo sufrió un accidente que lo llevó a perder el conocimiento de forma repentina.
“Yo no recuerdo los hechos, lo único que tengo claro es que al día siguiente desperté en Asotrauma”, afirmó el hombre.
El paciente estuvo recluido durante cinco días en la institución, y allí le informaron que tenía una fractura en la clavicula derecha, pero que no era necesario intervenirlo quirúrgicamente: “Unicamente me colocaron un inmovilizador y me enviaron para la casa”, aseguró.
Recuperación. Convaleciente viajó a Armenia en busca de trabajo, pero un dolor insoportable en la clavícula lo hizo regresar a Ibagué: “Sólo trabaje dos días, al tercero me regresé porque se me formó un gran hematoma en el pecho”, aseveró Díaz.
El doliente fue a exponer el caso en Asotrauma. Inicialmente le programaron una cita para el 22 de septiembre, pero al ver la gravedad del caso se la adelantaron para el 17 del mismo mes.
“En la cita me van a definir si me operan de la fractura, pero el daño está hecho porque Asotrauma actuó de forma negligente. Cómo es posible que me dejaran ir sin operarme”.
¿Un atentado?. Díaz se muestra incrédulo ante la forma en que ocurrió el accidente.
“No fue un accidente, fue un atentado. Yo recibí un golpe contundente en la cabeza lo cual me dejó inconsciente. Nadie me responde de forma precisa de cómo me encontró la ambulancia”, señala el afectado.
Sin respuesta. Q’HUBO se dirigió a las instalaciones de Asotrauma para conocer su versión del caso, y una funcionaria expresó que la unica persona autorizada para dar declaraciones era el gerente, Martín Alfonso Botero Cañón, pero no se encontraba en el recinto.