Lazos de sangre: Un abrazo después de 30 años

WEBabrazo

IBAGUÉ. La erupción del volcán Nevado del Ruiz arrasó con Armero y sepultó cerca de 25 mil personas, pero no con la esperanza de que dos hermanas se reencontraran. Después de 30 años de la tragedia que enlutó a Colombia, ayer en Bogotá las mujeres se volvieron a ver, abrazar y hablar gracias a la Fundación Armando Armero.

Historia. Lorena Santos, quien antes se llamaba Suly Janeth Sánchez es una sobreviviente del desastre natural del 13 de noviembre de 1.985 que sumió en el lodo a la ‘Ciudad Blanca’ y que le arrebató parte de su vida con tan solo tres años de edad. Santos fue dada en adopción por el Icbf el 15 de febrero de 1.986 y aunque no recordaba que tenía una hermana quería saber qué había pasado con su progenitora. Cuando tenía 16 años inició la búsqueda, “Busqué por internet. Intenté contactar a un investigador para dar con el paradedero de mi mamá”, relató Santos a Noticias Caracol.

Pero solo un día antes de la conmemoración de los 30 años de la tragedia dio el verdadero paso, pues el 12 de noviembre del año pasado se realizó la prueba de ADN.

“Tenía mucho sentimiento de llegar allá y la esperanza de que alguno tuviera en la camiseta mi nombre, pero no fue así”, contó la ‘armerita’.

Mientras en Ibagué, donde actualmente Santos reside tenía el anhelo de encontrar a su madre, en Bogotá Jaqueline Vásquez Sánchez, también sobreviviente no dejaba de pensar en la suerte que había corrido su hermana aquel día.

“No sabía cómo hacer. Veía por facebook nombres parecidos y le preguntaba:¿usted es mi hermana?, pero no obtenía respuestas”, señaló Vásquez Sánchez, quien para la época de los hechos vivía con su abuela en Guayabal.

Vásquez Sánchez, observó un video que le envió la Fundación Armando Armero y en la grabación vio a su hermana. Era Suly Janeth Sánchez, quien decía que era una de las niñas sobrevivientes.

“Escuché y dije es mi hermana. Me decían que estaba loca. Nos parecemos un poco”, indicó la mujer.

Inmediatamente empezó un proceso a través de la Fundación y donde le realizaron una prueba de ADN en el Instituto de Genética Yunis Turbay, confirmándoles su vínculo familiar.

 

Reencuentro. A través de la investigación ‘Niños Perdidos de Armero, Una Causa que Nos Toca a Todos’ y que es liderada por Francisco González, quien también es sobreviviente se llevó a cabo el primer reencuentro entre ‘armeritas’, “Sólo con el cotejo de ADN, podríamos darles la razón”, manifestó González.

Las hermanas se compararon físicamente y señalaron que coincidieron con varios lunares. Y que de ahora en adelante recordarán y recuperarán el tiempo perdido.

Noticias Recientes

Suscríbete

Recibe contenido diario con nuestra suscripción mensual.

Danos tu opinión