Las casas de tres familias del barrio Garzón se inundan de aguas negras cada vez que llueve

Tres familias conformadas por adultos mayores son las más afectadas. Fotos: Hélmer Parra/ El Nuevo Día – Q’HUBO.

Cada vez que llueve sobre la capital tolimense, la señora Amanda Castilla vive un verdadero calvario a raíz de las inundaciones de aguas negras con las que tiene que lidiar en su vivienda, ubicada en el barrio Garzón.

Pero ella no es la única afectada, dos de sus vecinos, personas de la tercera edad, también sufren las consecuencias, al parecer, originadas por la falta de desagües en el sector. Q’HUBO visitó el lugar y dialogó con los afectados.

Las lluvias son su calvario

Hace tres años los residentes de la Carrera Cuarta B número 26 del barrio Garzón, celebraban la pavimentación de la vía, la cual había estado dañada por varios años, sin imaginarse que dicho arreglo se convertiría en un dolor de cabeza para tres familias del sector, quienes cada vez que llueve, deben lidiar con inundaciones de aguas negras.

“Es un verdadero calvario, nosotros, personas de la tercera edad, cada vez que llueve tenemos que exponernos a la suciedad que rebosa de los sifones y de las alcantarillas, además del agua que entra de la calle. Yo ya me siento enferma, el pasado 10 de enero fue la última inundación y cada día es peor”, afirmó Amanda Castilla, una de las afectadas.

Al parecer, las inundaciones se generan por la falta de desagües en la vía y el taponamiento de la red de alcantarillado ubicada sobre la avenida principal. Según los afectados, todo inició después de que pavimentaron la calle.

Sin respuestas

Doña Amanda y Héctor Mendoza aseguraron que desde que empezó a registrarse el problema, comenzaron a enviar constantes peticiones a la Empresa de Acueducto y Alcantarillado (Ibal) y a la Administración municipal, pero no han sido escuchados. “Sólo nos programan visitas, aquí han venido ingenieros y otros funcionarios, algunos nos dicen que el alcantarillado de la avenida colapsó y otros que un tubo quedó mal instalado, pero de soluciones nada”, afirmó la señora Amanda.

Cansados por la situación, la ciudadana radicó una queja ante la Personería, pues asegura que ella y sus vecinos son afectados por los daños en sus inmuebles y además su salud empieza a deteriorarse por los residuos de aguas negras con los que deben de lidiar cada vez que llueve, y por el estrés que les genera el problema.

Dato

Las inundaciones, al parecer, se generan por el taponamiento del alcantarillado de la avenida principal y la falta de sumideros en la vía que fue arreglada.

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