IBAGUÉ. Un tiro fue escuchado en la madrugada de ayer en la casa número 3-39 con calle 15 del barrio La Gaviota, pero nadie se imaginó qué había pasado allí, hasta que llegaron dos patrulleros de la Policía Metropolitana.
En la vivienda encontraron el cuerpo de Nayei Patricia Tuberquia Usuga, tendido en una cama.
El que alertó a los agentes fue José Bertulio Salamanca quien dormía en uno de los cuartos de la residencia: “Al escuchar el disparo quedé quieto en la cama”.
Pasados unos minutos, Salamanca salió de su cuarto y vio el portón abierto que lleva a la calle, al igual que la puerta del apartamento de Tuberquia Usuga. Entró y con una linterna pequeña le vio sangre en la cabeza a la mujer.
Los investigadores de la Sijín empezaron las entrevistas mientras que otros hacían la inspección al cadáver, al que le encontraron un balazo en la cabeza.
La occisa estuvo con Alexander Montoya Salamanca, quien había salido de la cárcel con libertad condicional. El sujeto tiene dos procesos penales por los delitos de hurto y porte ilegal de armas de fuego.
Una familiar de Montoya que llegó a la vivienda donde ocurrió el crimen, le dijo a Q’HUBO que él había ido a las 9:30 de la noche del domingo a su casa y ella lo regañó porque estaba tomado. El hombre salió y no supo nada más hasta ayer cuando Bertulio Salamanca la llamó al celular a contarle lo ocurrido.
Es evidente que el primer sospechoso del homicidio es Montoya Salamanca, buscado por las autoridades.
¿Qué relación tenían? La familiar de Montoya dijo que conoció a la occisa en la cárcel porque ambas llegaron a visitarlo: “Yo no sabía que ellos tenía una niña”.
Tuberquia Usuga hace cuatro meses llegó a trabajar a la casa de Montoya porque era la encargada de cuidar los otros hijos de él, según contó la allegada del sospechoso.
El coronel Carlos Camacho, comandante de la Policía Metropolitana, manifestó que Montoya era la ex pareja: “En la investigación que tenemos, ella ya tenía otra pareja y debido a eso ocurrió el problema”.
