La calle fue sellada con una cinta para evitar la movilidad en carro/ Mi asombro fue total al ver cómo esta carcomido debajo de la carpeta asfáltica. Fotos: Jorge Cuéllar / Q’Hubo
Armando Calle
qhuboibague@gmail.com
En mi recorrido por las calles ibaguereñas, en esta ocasión llegué a la comuna Siete, específicamente al barrio Arkalá, donde me encontré con una de las tantas cavernas que amenazan con colapsar la movilidad. Allí ya creció hasta una planta de lulo.
Aunque en este punto de la calle 97 con carrera 13 ya es imposible que cruce un vehículo, pues los vecinos, para evitar un accidente mayor, decidieron poner cintas para que el peso de los carros no termine de hundir la cáscara que cubre la cueva.
Pero en este hueco, que mide al menos dos metros de diámetro y de fondo unos tres metros, sin contar lo que puede tener de cárcava, y debido a una posible rotura de tubería de aguas negras, se ve el recorrido del agua y se siente el hedor que genera el líquido contaminado.
Muchas personas que pasan por este barrio lo hacen temerosos de que de pronto no se les vaya a romper el asfalto en el momento en que caminen y se den un baño de agua podrida y en el peor de los casos sufran alguna fractura por el golpe de la caída.
Los vecinos, a este hueco que lleva cerca de un año de haberse formado, al parecer por el daño de la red de alcantarillado, también le dicen ‘La Huerta’, pues han crecido diversas plantas, tanto a su alrededor como dentro del agujero.
Algunas personas tampoco ayudan y vierten basuras y escombros agudizando el problema, pues incluso por allí pasan los estudiantes.
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