Miriam Brochero completa casi un año sin tener noticias de su hijo menor, Julián David.
A finales de julio de 2020, el muchacho salió de su casa ubicada en el barrio La Paz de Ibagué. Le dijo que iba a caminar, como era costumbre.
Ella salió de la vivienda a mirar hacia donde cogía su hijo y vio que Julián tomó camino hacia la vereda Ancón Tesorito.
Aunque creyó que por lo empinado del terreno Julián volvería pronto a casa, no fue así y completa 10 meses esperando a que se asome a la ventana y le diga: «mamá, llegué, abrame la puerta».
En diálogo con Q’HUBO, la dama confesó que la ausencia de su hijo le tiene partida el alma en dos. Durante todo este tiempo, Julián no se ha ido ni un instante de su pensamiento y aunque ya cumplió 21 años, para ella es un niño, pues cuando él tenía 12 años de edad, sufrió un accidente de tránsito y quedó con cierta discapacidad emocional y con dificultad para caminar.
Una persona lo vio
«Duramos unos cuatro meses saliendo todos los días a buscarlo. Policías amigos, amigos de la Defensa Civil y personas del barrio, entre otras, subieron la montaña por las diferentes zonas de acceso y no encontramos un zapato, alguna de las prendas que llevaba, nada, ni siquiera el tapabocas rojo que ese día se puso», dijo la señora Miriam.
La única pista que encontraron fue el testimonio de un poblador de la zona. Según el hombre, a eso de las 2 de la tarde del 27 de julio, cuando él bajaba en un caballo, se encontró a Julián y el muchacho le había pedido agua. No obstante, el señor no lo pudo ayudar porque no llevaba ni una gota del preciado líquido.
El campesino le reiteró a la familia, que Julián habría seguido subiendo la montaña, pero cuando él subió camino a su casa, no lo volvió a ver.
«La zona es de muy difícil acceso y no sé cómo hizo Julián para llegar allá. Bajar es más complicado, por eso creo que mi hijo no bajó. Sí él hubiera bajado obligatoriamente habría pasado por el frente de nuestra casa y seguramente hubiera estado muy cansado y hubiera tocado la puerta (…)», expresó la progenitora.
Tiene esperanza
La madre indicó que tiene la esperanza de que Julián esté vivo: «mi corazón me dice que él está bien y lo esperaré todos los días de mi vida. Yo soy evangélica y le pido a Dios que si algo malo me le pasó, me envíe una señal, una respuesta. Para terminar con esta incertidumbre. Para mí, él no bajó de la montaña (…). Cada lunes y el 27 de cada mes, salgo al andén de mi casa, miro la montaña, pienso que va a regresar y le pido a Dios que me ayude», expresó.
Solos en la búsqueda
Agregó la señora Miriam Brochero, que las autoridades no le han colaborado mucho en la búsqueda. «La búsqueda la hemos hecho la familia y los amigos. Hemos recorrido todos los barrios de Ibagué y solo dos personas aseguraron haberlo visto, pero al observar las cámaras de seguridad o corroborar la información nos dimos cuenta que no era él. Instauramos la denuncia en la Fiscalía, pero no han llegado a la zona a investigar», aseguró.
Tome nota
Miriam Brochero invita a las personas que conozcan el paradero de su hijo, informarle a la línea 3185952239 o 3502114435. Una característica de Julián David Brochero es que camina con dificultad.
Cifra
27 de Julio de 2020 fue el día en que Julián desapareció.