Luz Estela trabaja de domingo a domingo en la plazoleta Santa Librada. Fotos: Hélmer Parra/ Q’Hubo.
REDACCIÓN Q’HUBO qhuboibague@gmail.com
Q’Hubo dialogó con Luz Estela Rodríguez, una mujer valiente y aguerrida que labora desde hace 32 años en la plazoleta Santa Librada del centro de la ciudad vendiendo y reparando relojes.
Treinta años como vendedora
Luz Estela Rodríguez es una ibaguereña a la que muchas personas que frecuentan el Centro de la ciudad conocen o han visto en algún momento debido a que desde hace 32 años labora como relojera en la plazoleta Santa Librada, ubicada en la calle 14 con carrera Tercera, lugar donde comparte espacio con otros colegas que se desempeñan en el mismo oficio.
Esta mujer, que se esmera por mantener elegante y bien maquillada durante su jornada laboral, llega todos las mañanas a su puesto de trabajo a bordo de una silla de ruedas eléctrica debido a una discapacidad física que le afecta la movilidad; sin embargo, esto no ha sido impedimento para progresar, tener hijos y alcanzar sueños.
Lus Estela recuerda que estudió hasta décimo grado de bachillerato, pero un día no regresó al colegio debido a que en aquel tiempo los entornos escolares no eran espacios incluyentes para personas con movilidad reducida. Después de tomar esa decisión, buscó empleo en varias empresas como cajera o vendedora, pero debido a su discapacidad, le negaban las oportunidades.
Un día cualquiera, a principios de la década de los 90, Lus Estela se vino a recorrer el Centro de la ciudad y allí varios amigos le propusieron vender productos en la calle. Ella aceptó y como estaban en pleno diciembre, una señora le dió algunos artículos de navidad para que empezara a generar ingresos. Recuerda que en aquella temporada se ganó 50 mil pesos, entonces le quedó gustando el oficio y siguió laborando como vendedora ambulante.
Ejemplo de lucha
Luego de varios años trabajando en la esquina de la calle 15 con carrera Tercera, Luz Estela se ubicó en la plazoleta Santa Librada, lugar donde ha permanecido durante 27 años, tiempo durante el cual logró construir su proyecto de vida y sacó adelante a sus dos hijos, que hoy tienen 27 y 28 años de edad. Ambos le siguieron los pasos a su señora madre y mientras uno de ellos tiene un negocio similar contiguo al de ella, el otro estudió Administración Financiera en la Universidad del Tolima y en la actualidad importa y distribuye relojes tipo Smartwatch al por mayor.
Según ella, estos logros son gracias a la fidelidad de la clientela y a su persistencia y capacidad de trabajo, debido a que labora doce horas diarias, le ofrece garantía a sus clientes, maneja precios justos y atiende de la mejor manera. A pesar de que es una mujer joven, le preocupa su vejez y por eso trabaja duro para asegurar una vida digna en el futuro.
Durante la pandemia no pudo salir a trabajar, sin embargo, contaba con algunos ahorros que le permitieron mantenerse durante varios meses. También tenía inventario de mercancía y apenas pudo retomar labores, regresó al centro donde en la actualidad continúa vendiendo y arreglando los relojes de miles de ibaguereños.
Tome nota: Luz Estela Rodríguez vende relojes análogos y digitales para dama y caballero desde $10 mil hasta $120 mil pesos. También los repara y les cambia el pulso y la batería. Para contactarla, puede llamar al teléfono 3105580350 o visitarla en su puesto de trabajo ubicado en la plazoleta Santa Librada.
