MELGAR. Sobre las 2:00 de la madrugada de ayer llegó a Neiva el cuerpo de Maryuri García Rojas, quien murió en un centro asitancial de Ibagué después de que fuera agredida brutalmente por su ex esposo el pasado 11 de junio, cuando se encontraba durmiendo en su vivienda ubicada en un populoso barrio de Melgar.
La mujer, quien recibió certeros golpes en la cabeza con un palo y un cuchillo presuntamente por parte de su ex pareja, permaneció en la UCI del Hospital Federico Lleras Acosta, hasta la madrugada del lunes, día en que falleció.
Según lo manifestado por los familiares de García Rojas, la mujer hace seis meses había decidió terminar la relación que llevaba por cinco años con Aldemar Rojas Balbuena, razón por la cual el hombre había perdido la razón amenazándola constantemente.
“Ella tal vez se cansó del maltrato que le venía dando él, ella hasta le hizo cambiar las guardas de la casa donde vivía y al parecer la niñera de los niños fue la que le dio la copia nueva al tipo para que ingresara a cometer el asesinato”, manifestó Orlando García, hermano de la víctima.
Ya la había golpeado
La mujer, quien era estilista, hace tres meses había recibido por parte del presunto homicida un fuerte golpe con una piedra a la altura de su cabeza que la mantuvo varios días en muy mal estado de salud.
“Según lo que nos contaron las amigas de ella, ni lo denunció, no se si le tenía miedo o qué, pero no fue capaz de poner en conocimiento de las autoridades ese hecho para que aunque sea le hubieran puesto una medida de alerta o algo así”, agregó el hermano de la mujer.
Los niños lo vieron todo
Todo indica que una mujer que le ayudaba al cuidado de los dos de los tres hijos de la víctima, fue la responsable de haberle facilitado las llaves al presunto homicida que ingresó en horas de la madrugada del pasado 11 de junio.
“Los niños nos contaron que vieron cuando el papá entró muy pasito y les hizo señas de que no hablaran, llegó hasta la cama donde reposaba Maryuri y la cogió duro de las dos manos, cuando ella fue a gritar empezó a meterle papel en la boca, procediendo a golpearla según dijeron los niños con un palo y un cuchillo”, agregó el acongojado familiar de la mujer.
Agregó que el mayor de los pequeños que tiene 6 años de edad decidió salir a buscar ayuda, golpeando en casas y haciendo sonar pito del taxi en el que había llegado su padre, sin embargo nadie salió para poder ayudar a su progenitora.